Mutua Madrid Open

Alcaraz se baja del Mutua Madrid Open: "Si jugaba había riesgo de joderme más"

El murciano desvela una lesión nueva en el muslo izquierdo que le impedirá jugar en la capital de España, pero espera estar recuperado para Roland Garros, incluso para el Masters 1.000 de Roma

“Estoy jodido”. Hasta tres veces lo repitió Carlos Alcaraz, muy serio, con la voz ronca, algo tomada, en una sala de prensa abarrotada. Jodido por él mismo y por los aficionados, porque el murciano confirmó lo que “todos sospechaban”: no va a poder jugar el Mutua Madrid Open. La noticia sí era esperada, pero no el motivo. En la final del Barcelona Open Banc Sabadell fue atendido en la zona del aductor de la pierna derecha. Pudo acabar el encuentro contra Holger Rune, aunque algo limitado, de físico y mentalmente al estar pendiente de esa molestia, que no parecía muy grave. “Pero también noté otra cosa en el isquio izquierdo. El martes me hice una pruebas, estuve valorando con mi equipo, con los médicos, a ver si podía jugar en buenas condiciones, sin riesgo, pero no he mejorado mucho y hay que escuchar el cuerpo. Aunque Madrid sea una ciudad que espero todo el año para poder jugar y lo hago con mucha emoción e ilusión, no han salido las cosas como yo quería. Hemos tomado la decisión de no tomar riesgos de cara al futuro, porque podía estar jodido más tiempo de la cuenta”, aseguró. “Si juego a lo mejor tengo que estar parado varios meses, y a partir de ahí había que tomar una decisión, que ha sido dura”, añadió.

Otra vez una lesión se entromete en su camino en la gira de tierra batida, que, de momento, en su todavía corta carrera, no ha podido completar del todo. En 2022 descansó en Roma después de ganar en Miami y Madrid sus dos primeros Masters 1.000. En 2023 faltó en Montecarlo tras conquistar Indian Wells y hacer semifinales en Miami. En 2024 tuvo el problema en el antebrazo que le martirizó y sólo pudo acudir, y con problemas, a la Caja Mágica, justo la cita que se pierde esta vez, aunque admite que esta lesión muscular de ahora le preocupa menos que la del antebrazo porque ya ha “lidiado con ella”. No tiene la incertidumbre del año pasado, en esta ocasión sabe los pasos a seguir.

Diez partidos en doce días

Ha pagado en parte la acumulación de partidos de las últimas dos semanas, diez en doce días, para levantar su primer título en Montecarlo y llegar a la final de Barcelona. Su plan a partir de ahora es hacerse nuevas pruebas el lunes y ver la evolución. En una semana o algo más, empezará a entrenarse de nuevo si todo va bien. “No quiero adelantarme, pero creo que para Roland Garros estaremos seguro, y vamos a intentar ir a Roma”, desveló. El año pasado ya llegó con dudas a París y pudo levantar su primera Copa de los Mosqueteros. Si va a la capital de Italia, se reencontraría con Jannik Sinner, pues allí será donde el número uno vuelva a las pistas, una vez cumplida su sanción.

Djokovic, Swiatek, Sabalenka...

Las semanas en Madrid siempre tienen un punto de estrés para Alcaraz, como sucedía con Rafa Nadal. Desde que llegó a la capital de España, tuvo varios actos como los premios Laureus, la presentación de su documental o la participación en “El Hormiguero”. Lo hacía con una parte de su mente pensando en las pruebas médicas, mientras iba anulando sus sesiones de entrenamiento. Sin tocar la raqueta desde el domingo, sin poder adaptarse a la altitud, la baja estaba cantada, aunque admite que le ha dado tiempo a asumirla. “Volveré más fuerte. No he estado de bajón, lo he aceptado muy bien, he puesto toda mi energía para intentar recuperarme”, dijo. El Mutua Madrid Open pierde uno de sus principales alicientes, pero hay muchos más como el regreso de Djokovic (su última participación fue en 2022, que además ha sido su única presencia desde la pandemia) ver a la sensación brasileña Joao Fonseca, a la joven Andreeva o el duelo entre Sabalenka y Swiatek, que han disputado las dos últimas finales, espectaculares, con un triunfo para cada una.