Tenis

Las claves de la final de Roland Garros según Jordi Arrese: "Alcaraz tiene que buscar su derecha, mover a Sinner y meterle cambios de altura"

Alcaraz es el único jugador que ha sido capaz de derrotar a Sinner desde agosto del año pasado. Es la primera final para el italiano en París. Carlitos busca su quinto "Grande"

Alcaraz busca su segundo título de Roland Garros
Alcaraz busca su segundo título de Roland GarrosASSOCIATED PRESSAgencia AP

El año I después de Nadal en París coronará a uno de los dos mejores jugadores del mundo. Lo que empezó con el inolvidable homenaje al mejor jugador de la historia sobre tierra batida y con la placa de Rafa en la Philippe Chatrier concluirá con un duelo directo entre las dos raquetas llamadas a dominar el circuito en los próximos años.

Con el «Big 3» convertido en un recuerdo, el tenis ha encontrado dos jugadores sobre los que edificar una nueva era. Jannik Sinner y Carlos Alcaraz se van a medir por primera vez en una final de un Grand Slam. La superioridad que han demostrado a lo largo del torneo es el anuncio de un tiempo que ya está aquí. Carlitos ha acabado con compañeros de generación como Musetti y Shelton. El italiano se encargó de ejecutar a Djokovic después de triturar a los cinco rivales que precedieron al serbio. La trayectoria de Sinner intimida: ha estado menos tiempo en pista, no ha cedido un set, sólo ha encajado 53 juegos y ha firmado tres roscos. Impactante. Pero el problema del de San Cándido es que es precisamente el murciano quien va a estar enfrente. Suma cuatro «Grandes», uno de ellos en París, firma siete victorias ante Sinner en once partidos y eso incluye los cuatro últimos. El último fue en Roma hace menos de un mes, aunque el Sinner del Foro Itálico llegase condicionado por su reaparición después de los tres meses de sanción por dopaje.

El Alcaraz de la gira sobre tierra batida ha conseguido mostrar una regularidad y una consistencia que le han hecho levantar el título en Montecarlo y Roma. Si no lo hizo en Barcelona ante Rune fue por los problemas físicos que le apartaron de Madrid. De la falta de consistencia en el primer tramo del año, pese a ganar el título en Róterdam, no ha habido rastro sobre la arcilla roja y menos en París. Alcaraz encadena trece triunfos en el Bosque de Bolonia asentado en una fe inquebrantable en sus opciones, elevando el nivel cuando parece perdido y gestionando momentos difíciles con solvencia.

Jordi Arrese, excapitán de la Copa Davis y comentarista de Eurosport, ofrece apuntes de por dónde puede ir la final. «Sinner es un italiano muy alemán, que antes jugaba demasiado cuadriculado y ahora ha ido mejorando muchísimo de cabeza, a nivel mental ha progresado un montón». Y continúa: «Desde hace un año y medio ha metido en su juego la derecha paralela que era algo que antes no tenía. Es un jugador que utiliza mucha energía, es muy eléctrico y siempre coge la bola muy arriba. No deja respirar a quien tiene enfrente y mete muchísima presión con todos sus golpes. Eso le hace un jugador incomodísimo para los rivales».

Arrese detalla más aspectos del juego del italiano: «Ha metido más velocidad a su primer servicio, lo ha subido fácil unos 15 kilómetros por hora y eso a estos niveles es mucho. En los dos servicios ha progresado y ha sido el jugador que más rendimiento ha sacado en el torneo con el segundo saque. Ahora es bastante potente y le corre mucho la bola. Al resto mete siempre muchísima presión y las opciones de Carlos pasan por hacer un buen porcentaje de primeros mandando para que Sinner no esté cómodo. Con el segundo es una de las situaciones en la que Jannik más aprieta y mete más presión que nadie».

Y señala un punto fundamental: «En la final una de las claves va a ser que pueda moverle y que coja la derecha. Mandar de derecha y moverle es básico para que él sienta que no domina el partido. Otro factor es que Alcaraz pueda meter cambios de altura. Con Sinner los cambios de altura en tierra batida son la mejor arma para incomodarle. Carlos a veces no es muy propenso a usarlos porque prefiere dar palos, pero tiene que utilizarlos para que la final vaya por donde quiere».

Desde el entorno de Alcaraz hay un optimismo prudente ante la final. «Carlos tiene un nivel muy, muy alto, pero es muy difícil mostrarlo en cada partido. Cuando juega para adelante, valiente, sin miedos, tiene un potencial que todavía no hemos visto. Cuando juega para adelante, sin presión, es un fuera de serie. Pero está la otra parte, las presiones, las tensiones, los miedos, las dificultades, los otros jugadores,... todas esas cosas también juegan», apunta Juan Carlos Ferrero.

«Carlos lo que tiene que hacer es fijarse más en él, no tanto en los demás y buscar el máximo nivel. Es la vía por la que nosotros vamos, que persiga hacer las cosas bien sin fijarse en quién está enfrente. Si lo logra, conseguirá un nivel muy alto. Y cuando tiene confianza en su juego, cuando lucha a su máxima intensidad a los demás se les puede hacer muy cuesta arriba», asegura el exnúmero uno del mundo y ganador una vez en París.

La presencia de Sinner en la final es una motivación más: «Creo que se retroalimentan. Es bueno que Jannik esté jugando bien de nuevo y que los demás, no sólo Carlos, tengan que subir el nivel para competir contra él. Carlos ha madurado en las formas de reaccionar ante los problemas, antes era un poco más emocional y ahora todavía alguna vez hace una pataleta, pero en general maneja mucho mejor los problemas que se le pueden plantear en la pista». Y problemas hoy seguro que va a haber en algún momento.