Diálogo social

Sánchez: no a subir el salario mínimo, pero sí el de funcionarios que cobran 6 veces el SMI

El presidente del Gobierno justifica la congelación del salario mínimo para no asfixiar más a los empresarios

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no lo dudó este martes. Al término del Consejo de Ministros, durante su comparecencia ante los medios de comunicación para presentar un informe de balance de su primer año de legislatura, denominado «Cumpliendo», bajó al ruedo político y entró a opinar sobre la no subida del salario mínimo interprofesional. Eso sí, no lo hizo ni a la primera pregunta de un medio de comunicación, ni a la segunda. El jefe del Ejecutivo espero a la cuarta para ofrecer su diagnóstico de la situación. Y lo hizo desde una triple vertiente.

Primero, reivindicó lo hecho, es decir, el 29% de aumento que ha experimentado el salario mínimo en los dos últimos años. A continuación, puso el énfasis en el compromiso adquirido por el Gobierno para situar al final de Legislatura el SMI en 1.100 euros, frente a los 950 euros actuales. Y, por último, valoró la situación económica, que le lleva a ser prudente en defensa de los puestos de trabajo y a no subir ahora el salario mínimo para evitar asfixiar aún más a las empresas, en un momento de tormenta económica.

De esta manera, se alineó con la tesis defendida por la vicepresidenta económica del Gobierno, contraria a subir en medio de una crisis severa como la actual el salario mínimo. Esta postura también ha sido abanderada por la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, y por los ministros de Hacienda y Seguridad Social. Según Sánchez, esta congelación del salario mínimo permitirá a las empresas «sobrevivir». Preguntado por las razones para que, sin embargo, a funcionarios y a pensionistas sí se les suba ese 0,9% de previsión de inflación en 2021, insinuó que estas alzas, con un coste de 3.000 millones de euros, no suponen un hachazo al empresario, como si su elevada factura no se pagara con los impuestos de todos los contribuyentes, incluidos los de los empresarios. Es más, al presidente le pareció de justicia social, obviando que este aumento afecta también a pensionistas con nóminas superiores a 2.500 euros, y a empleados públicos, como los miembros de su Gabinete, que cobran, al menos, seis veces el SMI. Por eso, el Consejo de Ministros aprobó ayer la prórroga del salario mínimo actual de 950 euros hasta que los empresarios y los sindicatos pacten su aumento, en cumplimiento del artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores. De esta manera, se evita un vacío legal mientras los agentes sociales negocian, tal y como adelantó ayer LA RAZÓN.