Banca

Caixabank advierte de que están en juego 43.000 empleos si no hay un acuerdo en el ERE

Gortázar confirma que escuchará al Gobierno y negociará conjuntamente con los sindicatos, pero “la decisión final la tomamos nosotros”. Reitera que no elevarán las comisiones

El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, durante una rueda de prensa para presentar los resultados del primer trimestre de 2021
El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, durante una rueda de prensa para presentar los resultados del primer trimestre de 2021Rober SolsonaEuropa Press

“Nosotros escuchamos todas las voces, del Gobierno y los sindicatos, pero las decisiones sobre el futuro de la entidad y sus trabajadores al final las tenemos que tomar nosotros”. Con estas palabras quiso zanjar el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, cualquier duda sobre la resolución del ERE planteado por la fusión con Bankia. “Nosotros vamos escuchar a todo el mundo, pero nuestra obligación es tomar la mejor decisión conforme a los intereses de la entidad”, en un escenario de tipos estructuralmente bajos y de transformación digital, manifestó.

Gortázar defendió la necesidad de acometer estos despidos con un acuerdo rubricado con los sindicatos, “no contemplo otro escenario” -manifestó-, aunque también advirtió de que, si no se materializara el expediente de forma consensuada “estarían en riesgo no 8.000 empleos, sino los 43.000 restantes de la entidad, y eso no nos lo podemos permitir por el bien de todos”. Aun así, el directivo no descartó del todo una decisión unilateral. “Nosotros vamos a escuchar todas las voces, todas las críticas y también las sugerencias. Pero al final tendremos que tomar las decisiones que pensamos que serán las mejores para la entidad”. También recordó que no llevar a cabo este ERE “no es una opción”, como tampoco “alargar la agonía tres o cuatro años. Nuestro compromiso es hacer las cosas de la mejor manera posible, pero no podemos quedarnos en la inacción”.

Gortázar no quiso hacer estimaciones sobre el coste que va a tener el ERE para el banco “porque son asuntos que se están negociando ahora mismo sobre la mesa. Asimismo, ha defendido que su intención es negociar “hasta el final” y que entiende “perfectamente” que los sindicatos a hagan críticas y manifestaciones a este proceso, pero espera sellar un acuerdo “razonable” con ellos.

El consejero delegado contestó a las preguntas de los periodistas tras la presentación de resultados de la entidad en el primer trimestre del año, en el que la nueva CaixaBank -fruto de su fusión con Bankia- logró un beneficio de 4.786 millones de euros, una vez incorporados los impactos extraordinarios asociados a la conversión de ambas entidades. Principalmente los 4.300 millones generados por el fondo de comercio o ‘badwill’ negativo de la fusión, aunque Gortázar aclaró que es un tema “técnico” que no nos ha proporcionado “ni un solo euro en caja” a la entidad. Sin estos extraordinarios, el beneficio del banco se situaría en 514 millones, 5,7 veces más que en 2020, cuando los resultados se vieron afectados por las provisiones realizadas para hacer frente a la crisis del coronavirus. De este resultado, 444 correspondieron a la actividad bancaria y de seguros, 58 proceden de la entidad portuguesa BPI, y 12, de participaciones.

Al ser cuestionado por las quejas formuladas por la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y a la que posteriormente se sumaron otros ministros, sobre que iban a exigir que se “minimizaran” los despidos -que en CaixaBank afectarían a casi 8.300 trabajadores, con 7.791 salidas y la reubicación de otras 500 personas en filiales de la entidad-, Gortázar se mostró conciliador. “Por supuesto que hay margen de negociación y esperamos encontrar enfrente un punto de encuentro. No contemplo otro escenario que no sea un acuerdo”.

Respecto a las críticas a la subida de sueldos de los directivos y al reparto de bonus en plena crisis económica y social, que la propia Calviño tachó de “inaceptables”, el CEO de CaixaBank volvió a reiterar “máximo respeto” con las opiniones que pueda tener el Gobierno sobre el tema de la remuneración, pero se sumó a lo expresado por los consejeros delegados del Santander, José Antonio Álvarez; de BBVA, Onur Genç, y del Sabadell, César González-Bueno, defendiendo que es “un tema extraordinariamente reglamentado” desde la óptica de gobierno corporativo, ya que son decisiones que se toman en la Comisión de Retribución, se visan por el Consejo de Administración y se llevan, eventualmente, a la Junta de Accionistas “con la máxima transparencia”.

El consejero delegado ha advertido también que los tipos de interés van a seguir negativos “durante muchos años”, pero ha recalcado que no es voluntad del banco cargar esta situación a los clientes vía nuevas comisiones. “Lo que parecía coyuntural se ha ido prolongando en el tiempo”, aunque no cree que se mantengan “indefinidamente. No tengo una bola de cristal, ni siquiera la tienen los bancos centrales, pero las proyecciones de los tipos señalan que se mantendrán en terreno negativo. Y no lo digo yo, sino los propios mercados”.

La gran banca española -conformada por Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell y Bankinter- ha ganado cerca de 7.825 millones de euros en el primer trimestre, frente a las pérdidas del año anterior, por las menores dotaciones para hacer frente a la pandemia y el impacto contable positivo de la fusión de CaixaBank y Bankia.