Electricidad

Iberdrola y Endesa se desangran en más de 17.000 millones desde que el Gobierno empezó a tomar medidas

Solo ayer Iberdrola se dejó 3.700 millones más los 1.300 de Endesa. Se unen a los 2.300 que perdieron el martes, cuando Sánchez aprobó la confiscación de 2.600 millones de beneficios, y a 10.000 más desde junio

Si el Gobierno pretendía una transición energética pacífica, con el respaldo del esfuerzo inversor de las eléctricas, para el que necesitarán financiación, la confrontación con ellas no parece la mejor apuesta. Sin embargo, el Gobierno solo parece ocupado en tratar de salir al paso de la presión por el precio del megavatio hora, que batirá hoy todos los récords, sin importarle los daños colaterales. Mientras el Ministerio de Transición Ecológica insiste en que todas las medidas contra las eléctricas son «acordes a la legislación, no tienen carácter confiscatorio» y, por tanto, lo que crean es certidumbre, la realidad dicta todo lo contrario.

La prueba palpable de la inseguridad jurídica que han introducido las últimas decisiones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para «presuntamente» abaratar el recibo vinculado a la tarifa regulada, que pagan cerca de 11 millones de consumidores, hogares en su mayoría, es el desplome de más de 17.300 millones de euros en capitalización de las eléctricas desde finales de mayo, cuando se filtró que el Gobierno aprobaría la tramitación para frenar la presunta sobrerretribución que percibe en el mercado mayorista la generación de energía mediante las centrales eléctricas no emisoras de CO2 (hidráulicas y nucleares) anteriores a 2005, que se traduciría en un recorte de 1.000 millones en los llamados «dividendos caídos del cielo» que reciben las empresas generadoras.

Desde entonces y hasta hoy, Iberdrola se ha dejado nada menos que 11.500 millones de euros mientras que Endesa se ha descapitalizado en 5.800 millones por la inseguridad que han introducido en los mercados sus recortes, confiscaciones y tijeretazos.

Y es que, justo antes de que comenzaran las andanadas del Gobierno socialcomunista contra las eléctricas, los títulos de Iberdrola cotizaban a 11,31 euros. Ayer, cerraron por debajo de los 10 euros, a 9,49 euros. Una caída del 19% consecuencia directa de las decisiones del Gobierno.

Por su parte, las acciones de Endesa, la otra gran perjudicada, se pagaban a el viernes 28 de mayo, antes de que se filtrara el primer recorte, a 23,65 euros mientras hoy abren a 18,17 euros, una caída porcentual incluso más acentuada del 30%.

La situación se ha agravado desde que el pasado martes el Ejecutivo decidiera confiscar hasta la primavera 2.600 millones de euros a las eléctricas por lo que Sánchez y sus socios de Podemos consideran beneficios extraordinarios obtenidos del alto precio del gas en la retribución que reciben la generación nuclear e hidráulica. Todo ello, consecuencia de factores ajenos a las propias eléctricas, por el elevado precio del gas natural en los mercados, que es utilizado por los ciclos combinados. Los ciclos fijan habitualmente el precio marginal de la retribución a todas las tecnologías, pese a que sus costes de generación sean inferiores. Además, se suman también los costes de derechos de emisión de CO2 , cuyo precio se ha duplicado por decisiones políticas de los países de la UE.

En consecuencia, las dos grandes eléctricas sufrieron ayer su segunda sesión consecutiva de castigo después de que el Gobierno se sacara de la manga no un as sino una baraja entera en mitad de la partida. Si el martes se dejaron por el camino algo más de 2.300 millones de euros, ayer fueron 5.000 millones (3.700 para Iberdrola y 1.300 para Endesa).

Las previsiones apuntan a que las cuatro principales eléctricas Iberdrola, Endesa, REE (participada al 20% por la SEPI) y Naturgy obtengan un beneficio conjunto de unos 7.000 millones de euros, y el impacto de las citadas medidas es de más de 2.600 millones, esto supondrá una posible caída del 30% del beneficio, según apuntó el responsable de análisis de IG, Sergio Ávila.

La Comisión Europea aseguró ayer que «estudiará» las medidas que el Gobierno español presentó ayer para rebajar la factura de la luz, según avanzó el vicepresidente de la CE para el Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans.