IFM fracasa en su OPA sobre Naturgy al lograr solo un 10,83% de las acciones

La pretendida OPA de IFM sobre el 22,7% de las acciones de Naturgy ha terminado ha quedado reducida a casi nada, a una gran compra de acciones, tras haber logrado convencer solo al 10,83% de los accionistas, según la información ofrecida por La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que ha decidido suspender cautelarmente la negociación de los títulos de Naturgy en las bolsas de valores, a la espera de confirmar dicha información tras el fracaso de la operación.

El fondo australiano de inversión se había puesto como primer objetivo alcanzar el 22,7% de la compañía energética española, pero la negativa de los accionistas mayoritarios a ceder le llevó a replantearse un cambio de estrategia. Así, el fondo australiano decidió limitar su participación al 17% del accionariado, pero a largo plazo, y llevarlo a cabo en dos fases. En una primera -la que se ha producido ahora- intentaría alcanzar entre un 8% y un 10% -finalmente ha sido un 10,83%-, para posteriormente ir elevando su participación en una segunda operación sin fecha límite. Pero incluso ese objetivo parece ya inalcanzable.

La tensión y el intercambio de golpes se ha prolongado durante los últimos nueve meses, durante los que IFM ha presionado desde todos los ámbitos para lograr su objetivo, incluso anunciando que forzaría una cambio de estrategia de la compañía y una congelación del pago de dividendos. La respuesta fue inmediata y contundente. “Cualquier cambio en los principios” del plan estratégico aprobado en julio para los próximos cinco años requiere “de una mayoría reforzada del consejo de administración”, y una revisión de los principios de este plan no ha sido considerada por “este consejo en ningún momento”. Con esta contundencia los accionistas mayoritarios de Naturgy contestaron al responsable de IFM en España, Jaime Siles, que afirmó ante un grupo de periodistas que “sacrificaría la remuneración a los accionistas” para asegurar su crecimiento. Tampoco conseguirá ese objetivo.

Analistas y expertos no dudaban de que IFM alcanzaría al menos el 10% del capital, pero descartaban absolutamente que lograra el 17% -ni se planteaban el 22,7% inicial- que le mantendría en la carrera por lograr hacer efectiva la opa. Pero ha sido la propia CNMV la que ha confirmado que “la sociedad oferente ha renunciado a la condición de aceptación mínima”. Por tanto, batalla ganada por los accionistas mayoritarios, que podrán mantener planes y objetivos sin cambiar el rumbo.