Philip Morris: una transformación sin precedentes

Philip Morris, la mayor tabaquera del mundo, está comprometida desde hace más de diez años en un proceso de transformación para ofrecer a los fumadores adultos, que de otro modo seguirían fumando, alternativas que reduzcan el daño provocado por los cigarrillos. El objetivo último es conseguir un futuro libre de humo y generar un impacto positivo en la sociedad, pero para ello, se requiere de la investigación y desarrollo de nuevos productos sin combustión, que sean menos dañinos y estén avalados científicamente. En esencia, estamos hablando de estrategias de reducción del daño, algo que no es nuevo y se viene aplicando en otros ámbitos desde hace años con buenos resultados.

En el ámbito del tabaco, la idea es que la reducción del daño se utilice de manera complementaria a las estrategias ya existentes de prevención (evitar que los no fumadores comiencen con el hábito) y cesación (conseguir que el fumador actual deje el hábito). Lo cierto es que la visión transformadora de Philip Morris ha conllevado un cambio disruptivo en todos los ámbitos del negocio, esto incluye su visión de liderazgo, así como la gestión del talento.

En cualquier transformación es fundamental marcarse una serie de objetivos medibles año a año y por eso, Philip Morris se ha propuesto una serie de metas a alcanzar en 2025. Esta hoja de ruta hacia un futuro libre de humo, y en línea con su conversión en una compañía comprometida con la sostenibilidad, también marca la necesidad de poner a disposición de la sociedad toda la información disponible sobre el problema de la combustión y el papel que juegan las alternativas sin humo en la reducción del daño.

La compañía ha dado pasos fundamentales como el cambio de su modelo de creación de valor, pasando de B2B (por sus siglas en inglés Business to Business, es decir negocio a negocio) en el que el contacto con el cliente –reconocen desde Philip Morris– estaba muy lejano, a un modelo B2C, o Business to Consumer. Un cambio de estrategia en el que la comunicación y la transparencia han sido parte fundamental.

Ante la enorme desinformación que existe alrededor de estas alternativas es necesario que los fumadores adultos cuenten con información rigurosa sobre la evidencia científica que las avala para que puedan tomar decisiones informadas.

Actualmente, Philip Morris focaliza sus esfuerzos para lograr su objetivo de un futuro sin cigarrillos mediante una nueva propuesta de valor y capacidades innovadoras con las que comercializar productos que reducen la exposición del usuario a sustancias dañinas. De manera paralela, PMI sigue ampliando su apuesta por el bienestar y la salud del consumidor, ampliando sus capacidades hacia áreas de negocio que van más allá del tabaco y la nicotina.

Adquisición de empresas

Todo este proceso ha ido culminándose en los últimos doce meses, en los que PMI ha adquirido varias empresas en las que se incluyen: Vectura, un proveedor británico de soluciones innovadoras de administración de medicamentos inhalados; Fertin Pharma, desarrollador y fabricante líder danés de productos farmacéuticos y de bienestar; y OtiTopic, una empresa americana de desarrollo de fármacos inhalables.

El propósito de un futuro sin humo que lidera la compañía en el sector, la ha llevado a vivir una profunda transformación que pone a la ciencia, la tecnología, la investigación y la sostenibilidad en el corazón de su futuro. Pero, ¿qué otros elementos conforman la hoja de ruta de Philip Morris hacia el año 2025?

Capital humano

Philip Morris ha necesitado incorporar nuevos perfiles necesarios para abordar su particular transformación. Desde que iniciaron este proceso, ya cuentan con cerca de mil científicos de unas 30 especialidades diferentes como biomedicina, farmacología, e ingeniería. En España, concretamente en la localidad de Olivenza (Badajoz), la compañía ha creado un centro de atención al consumidor formado por más de cien empleados que dan respuesta a través de diferentes canales a las consultas de los usuarios de estos nuevos productos.

Capital intelectual

En el transcurso de esta transformación, el trabajo de Philip Morris en I+D se ha traducido en más de 4.600 patentes concedidas sobre productos libres de humo y más de 6.300 solicitudes pendientes. La compañía es reconocida como la 45º empresa más solicitante de patentes en la Unión Europea y es la única empresa tabaquera en el Top 50. Y es que, desde que se anunció su transformación, casi la totalidad del gasto en I+D se ha destinado al desarrollo de este tipo de productos.

Capital social y relacional

Pero esta transformación también se centra, y de una manera sustancial, en aspectos como la sostenibilidad y la igualdad. En este último punto, Philip Morris es una de las empresas destacables a nivel internacional, ya que en el año 2019 se convirtió en la primera compañía en conseguir la certificación en igualdad salarial que confirma la existencia de políticas de recursos humanos que garantizan la igualdad de salario y oportunidades para sus empleados, independientemente de su género. La compañía ha conseguido este año alcanzar el dato de que el 40% de su equipo directivo sean mujeres.

Capital financiero

La compañía ha invertido más de 9.000 millones de dólares en el desarrollo de productos innovadores e investigación científica como en la adaptación de su capacidad productiva a estos nuevos productos. El avance es innegable. Ahora mismo, más del 30% de los ingresos de la compañía proceden de alternativas sin humo, por lo que esta apuesta en firme está dando sus primeros frutos, aunque todavía queda mucho camino por recorrer.