Vivienda

Otra puerta que se cierra para los jóvenes: el precio de las habitaciones se dispara un 17% en cinco años

En todas las capitales de provincia ha subido a doble dígito, superando incluso el 50% en algunos casos

Imagen de un balcon en el barrio de Chueca en el que se anuncia el alquiler de una habitacion.
Imagen de un balcon en el barrio de Chueca en el que se anuncia el alquiler de una habitacion.Jesus G. FeriaLa razon

Inmaculada Lucas vive en una habitación de un piso compartido en las inmediaciones de Madrid Río por la que paga 370 euros al mes. Cuando llegó al piso en 2020, pagaba 340 euros. Ahora, su casero le ha propuesto una renovación del contrato a partir del próximo mes a abril por 440 euros, es decir, un 17,8% más. Una subida que, para Inmaculada, una joven murciana que vive en la capital por trabajo, es casi una invitación para mudarse. “El máximo que yo podría pagar son 400 euros. Todo lo que esté por encima me es imposible de asumir. Entre gastos de suministros, comida, pagar el máster...; si pago 440 euros de alquiler no llego a fin de mes”, asegura.

La opción de vivir en una habitación compartida es la única salida que le queda a muchos jóvenes como Inmaculada para emanciparse ante los prohibitivos precios y condiciones de acceso para la compra y los cada vez más elevados precios del alquiler. Pero, como en su caso, es una puerta que se va entrecerrando cada vez más. En los últimos cinco años, el precio de las habitaciones se ha disparado de media un 17%, según los datos recopilados por la web inmobiliaria idealista. Un aumento que, además, se ha visto agravado por la merma que ha sufrido en paralelo el poder adquisitivo. En el mismo periodo de tiempo, los salarios afectados por la negociación colectiva han subido en cada ejercicio, en el mejor de los casos, algo más de un 2%, haciéndolo por debajo del 1,5% en 2021, según los datos recopilados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

La escalada de los precios ha sido especialmente pronunciada en algunas capitales de provincia. Aunque las rentas han subido en todas a doble dígito, en algunas lo han hecho directamente de forma supersónica. En Pontevedra, por ejemplo, se han encarecido un 59%, pasando a costar una de media 255 euros al mes. Otro tanto ha ocurrido en Santa Cruz de Tenerife (un 55%, hasta los 325 euros), Almería (47%, hasta los 250 euros) y Lérida (46%, hasta los 270 euros).

En Madrid, donde vive Inma, los precios se han encarecido un 22% en el periodo, hasta los 450 euros de media. Ella entiende que su piso está “en una buena zona de Madrid” y, según la estadística de idealista, estaría en la media de los precios. Pero no al alcance de sus finanzas. Amén de que, según añade, su propietario le va a sacar en total 1.350 euros por el alquiler a una vivienda de tres habitaciones sin apenas haber realizado inversiones para mejorarlo.

Grandes ciudades y estudios

Madrid no es, sin embargo, la ciudad más cara para alquilar una habitación. En Barcelona hay que pagar 475 euros por una habitación después de que las rentas hayan subido un 12% en el periodo analizado. En San Sebastián, otro de los mercados más caros de España, el precio llega a los 450 euros. Y en Palma de Mallorca, donde la falta de vivienda es un problema endémico por la falta física de terreno para edificar nuevas viviendas, 400.

El 34,5% de los jóvenes españoles viven en pisos compartidos, pero a un elevado coste, pues deben destinar una cuarta parte de su salario para la renta de la habitación. Además, la oferta también sufre tensiones que se trasladan a los precios. La disponibilidad de pisos compartidos ha caído un 59% en Madrid en el último año, en línea con la fuerte reducción que ha sufrido el stock de viviendas en alquiler, según otro informe publicado por Idealista en agosto. A nivel nacional, esta caída fue del 45%, pero este retroceso no era igual en todas las ciudades, sino que en algunas capitales ha llegado a desplomarse más de un 70%, dándose los descensos más pronunciados en Palma de Mallorca (-78%), Barcelona (-73%) y San Sebastián (-71%). Por encima del 50% se sitúan Málaga (-62%), Guadalajara (-55%), Alicante (-54%), Tarragona (-53%) y Gerona (-53%).

Otra de las alternativas que se pueden plantear los que viven solos si no quieren compartir vivienda, un apartamento, está todavía más difícil para los bolsillos. Según idealista, su precio es de media en España un 79% más caro que el de una habitación. Mientras que el alquiler medio de una habitación en España se sitúa en los 350 euros, el de los estudios es de 625 euros después de haberse encarecido un 14% en los últimos cinco años. La mayor diferencia entre habitaciones y estudios se da en la ciudad de Badajoz, donde los apartamentos son un 131% más caros. Le siguen Valencia (127% más caros), Valladolid (121%), Ourense (115%), Córdoba (111%) y Lugo (108%). Con una diferencia de precio del doble o más se encuentran La Coruña (104%), León (100%), Segovia (100%), Santander (100%) y Castellón de la Plana (100%).

Entre las grandes ciudades, la menor diferencia se da en Madrid, donde alquilar un estudio es un 72% más caro que una habitación, mientras que ese porcentaje sube hasta el 84% en Barcelona y hasta el 86% en Málaga. En Palma se sitúa en el 94% y en Bilbao en el 97%.