Inflación

El IPC sube una décima en enero pese a la rebaja del IVA de los alimentos

El incremento del precio de los carburantes ha sido la causa principal tras la retirada de la bonificación. La inflación subyacente sube hasta el 7,5% y se sitúa ya un 1,7 puntos por encima del IPC general

La inflación interanual del IPC en enero de 2023 se ha situado en el 5,8%, de acuerdo con el indicador adelantado elaborado por el INE, lo que supone un aumento de una décima en su tasa anual, pese a la rebaja del IVA de la cesta de la compra. Este incremento se ha debido, principalmente, a que los precios de los carburantes suben más que en enero de 2022, marcados por la retirada de la bonificación de 20 céntimos que dejó de ser efectiva el pasado 1 se enero. También a que los precios de vestido y calzado han bajado menos en el arranque de este año de lo que lo hicieron en enero de 2022.

En este dato se incluyen, por primera vez, ponderaciones procedentes de la Contabilidad Nacional, así como los mercados libres del gas y la electricidad. También queda reflejada la bajada del IVA de los productos básicos de la cesta de la compra aprobada por el Gobierno, que no ha servido para rebajar este índice como se esperaba, una vez que que incluyó una reducción del 4% al 0% en frutas, verduras, leche, pan, huevos o legumbres y una rebaja del 10% al 5% en el IVA del aceite y la pasta. Eso sí, al menos en tasa mensual, los precios de consumo registraron en enero un descenso del 0,3% respecto al mes de diciembre.

Con la subida registrada en el primer mes de 2023, la inflación rompe con cinco meses consecutivos de descensos en su tasa interanual y retoma los ascensos.

Mal dato también el que corresponde a la inflación subyacente -sin alimentos no elaborados ni productos energéticos-, que subió cinco décimas, hasta el 7,5%, situándose 1,7 puntos por encima del IPC general, su valor más alto desde diciembre de 1986. En cuanto al Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), éste situó su tasa interanual en el 5,8%, tres décimas por encima de la registrada en el mes anterior. Por su parte, la variación mensual estimada del IPCA fue del -0,5%.

El Ministerio de Asuntos Económicos, que esperaba ver reflejado ya en enero un alivio de la inflación, ha preferido ver el vaso medio lleno y ha remarcado que la inflación “se ha estabilizado en enero en su nivel más bajo desde noviembre de 2021″ y que sólo subió una décima “pese a la retirada de la bonificación generalizada al combustible”.

Fuentes gubernamentales también incidieron que este dato adelantado está marcado por la novedades metodológicas incorporadas “para adaptarlo a la normativa de la Unión Europea y mejorar su calidad”. Entre dichos cambios se encuentra la incorporación al IPC del mercado libre del gas y de la electricidad; modificaciones en la estructura de ponderaciones para que la fuente principal para el cálculo de las mismas pasa a ser la Contabilidad Nacional (CN), en lugar de la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF), y la recolección de los precios por medio de dispositivos electrónicos, cambio que se hará efectivo a lo largo de 2023.

En lo que respecta al gas y la electricidad, las tarifas consideradas hasta ahora para el cálculo del indicador se referían exclusivamente al mercado regulado. A lo largo de 2022, las principales compañías distribuidoras adaptaron sus sistemas de procesamiento de la información para responder a las exigencias metodológicas del IPC, por lo que se pueden incorporar ahora los mercados libres de la electricidad y el gas en el cálculo del IPC “con plenas garantías”, explica el INE.

Asimismo, la estructura general de ponderaciones del IPC vigente desde enero de este año se obtiene a partir del gasto en consumo final de los hogares de la Contabilidad Nacional. Tras los cambios en las ponderaciones para 2023, los grupos que pierden más peso en la cesta de la compra son alimentos y bebidas no alcohólicas (del 22,6% al 19,6%); vivienda (del 14,2% al 12,7%) y vestido y calzado (del 6% al 3,9%).

El dato de enero, que deberá ser confirmado por Estadística a mediados del mes que viene, es cinco puntos inferior al pico alcanzado el pasado mes de julio, cuando la inflación escaló hasta el 10,8%, su nivel más alto desde septiembre de 1984.