Pensiones

Cómo es el nuevo sistema de jubilación que proponen los expertos para sustituir al actual

Fedea considera que el sistema actual es "ineficiente" por la falta de fórmulas de transición desde la actividad a la jubilación y por la percepción de que cobrar una jubilación es incompatible con el trabajo

Jubilados enfrente de un centro de mayores.
Jubilados sentados frente a un centro de mayoresJesús G. FeriaLa Razon

El galopante envejecimiento de la población y la oleada de jubilaciones que llegará de la jubilación del "baby boom" pone en riesgo la sostenibilidad del sistema de pensiones. Aunque el Gobierno ha desplegado varios mecanismos para engordar la hucha de las pensiones y hacer frente a estos retos, como mejorar los incentivos de la jubilación demorada, el destope de las bases máximas de cotización o sobrecotización del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) propone un enfoque radicalmente distinto.

Para el think tank, el sistema actual es "ineficiente" por la falta de fórmulas de transición desde la actividad a la jubilación y por la percepción de que cobrar una jubilación es incompatible con el trabajo. "El sistema de jubilación actual, donde el trabajador pasa de trabajar 40 horas a la semana a trabajar cero horas, carece de lógica", denunció Sergi Jiménez, encargado de desgranar de manera más detallada la propuesta de Fedea en una rueda de prensa celebrada el lunes.

El sistema de pensiones españoles ofrece algunas fórmulas como la jubilación activa, la jubilación parcial, la flexible y la compatible con trabajo autónomo pero su falta de incentivos han lastrado su éxito. Así, Fedea propone dar un giro de 180 grados al sistema de pensiones español reformando la legislación para que exista una sola modalidad de jubilación desde la primera edad posible de jubilación anticipada (61 ó 63 años), en la que se permitiera hacer la pensión "plenamente compatible" con cualquier trabajo o renta con el objetivo de "no desaprovechar" el talento sénior.

Con este fin, Fedea plantea crear un nuevo contrato laboral que permitiría que las personas que lo deseen puedan prolongar su actividad más allá de la edad legal de jubilación, trabajando a tiempo completo o parcial, en la misma o distinta empresa, por cuenta ajena o propia, sin topes máximos de retribución.

Este contrato, ha explicado Fedea, al efectuarse a personas que ya tienen asegurada su pensión pública, "debería tener un régimen extintivo especial, sin costes indemnizatorios para la empresa contratante" o sólo con un coste de unos meses, pudiéndose establecer un periodo de tiempo mínimo de preaviso para romper libremente la relación contractual en caso de desistimiento de cualquiera de las partes.

Durante la presentación del informe, el director general de Fedea, Ángel de la Fuente, señaló que sentido flexibilizar el ritmo al que se deja de trabajar y que se pueda compaginar trabajo y pensión "con las mínimas restricciones posibles". Para que a las empresas les sea "rentable" mantener a sus trabajadores más veteranos. Además, De la Fuente subrayó que "habría que acabar con las cláusulas de indemnización por despido" en el marco del nuevo contrato laboral propuesto.

"O sea que tú puedes seguir trabajando, pero luego no tienes derecho a que si te echan, pues te indemnicen por 40 años de trabajo, sino que en el momento en que se llega a la jubilación, hacemos borrón y cuenta nueva. Puedes seguir trabajando, pero si en algún momento, la empresa decide que ya no te necesita, te puede echar sin una indemnización tan grande como el sistema actual", precisó De la Fuente.

Así, la entidad entiende que la salida del mercado laboral hacia la jubilación no debería ser un proceso homogéneo para todos los trabajadores y tendría que tener en cuenta las exigencias físicas de su profesión y su estado de salud.

Jubilación parcial para todo el que la pida

Además, el paso a la jubilación debería ser un proceso "flexible", de forma que los trabajadores no pasaran de la noche a la mañana a estar jubilados y pudieran optar, voluntariamente, por una reducción gradual de la jornada laboral a través de una reformulación de la jubilación parcial, haciéndola accesible a todos los trabajadores.

Según Fedea, el actual sistema de jubilación parcial está muy condicionado a la aquiescencia de la empresa y sólo se está dando en empresas relativamente grandes. "La idea es integrarlo en el mecanismo general y permitirla generalizadamente para todos aquellos que quieran", apuntó Jiménez.

También explicó que este nuevo sistema de jubilación activa/flexible, además de permitir la compatibilidad de la pensión con un empleo en todas las edades por encima de una edad mínima, no debería conllevar penalización en la pensión una vez cumplidos los requisitos de edad y cotizaciones. En caso de no cumplirse esos requisitos, se fijaría una penalización "dependiente del nivel salarial", mayor para los niveles salariales altos y menor o inexistente para los bajos.

Al mismo tiempo, de este sistema propuesto por Fedea no podría quedar excluido ningún trabajador, siempre que cuente con un mínimo de años cotizados y con derecho a jubilarse; tendría que posibilitar seguir en el mismo trabajo a tiempo parcial "con cualquier porcentaje de jornada", y eliminar de la legislación actual la obligación de pasar un año por la jubilación demorada o la inactividad para poder acceder a la jubilación activa a todas las edades.

¿Cómo se cotizaría en este nuevo sistema?

Actualmente, tanto para la jubilación activa como para la demorada, la regla de cotización establece que, una vez completada la carrera contributiva, el trabajo posterior deje de cotizar o a la sumo, en el caso de la jubilación activa, lo hace a una tasa reducida.

En el caso de la propuesta de Fedea, en términos de cotización, se plantean dos opciones posibles:

-Que el acceso al trabajo después de empezar a cobrar pensión contemple una cotización simétrica respecto al resto de trabajadores (la misma tasa para todos).

-Que se efectúe un recálculo en positivo de la pensión una vez finalizada la demora o el periodo en el que se ha compatibilizado pensión y salario, compensando las cotizaciones adicionales aportadas al sistema durante el periodo de tiempo en el que se ha alargado la carrera laboral.

Para Jiménez, "en España se está haciendo el ridículo respecto a los países de la Unión Europea con la regulación de jubilación anticipada que tenemos, por querer enfatizar o incentivar la jubilación demorada con un premio "que no es especialmente generoso" en relación al establecido en otros países europeos.

Compatibilizar el subsidio de 53 años con trabajar

Fedea también ve fundamental permitir la compatibilización plena entre la percepción del subsidio de mayores de 52 años y el trabajo, pero no un periodo máximo de seis meses, como planteaba la reforma del nivel asistencial del desempleo que tumbó el Congreso.

Así, para Fedea, esta compatibilidad debería ligarse al salario. "Si el trabajador mayor de 52 años que cobra el subsidio recibe una oferta de trabajo que no es muy alta, le tienes que permitir percibir el subsidio completo y el salario. A medida que va recibiendo más salario, entonces ya le empiezas a retirar gradualmente el subsidio", ha señalado Conde-Ruiz.