Automoción

La salida de Rusia lastra los beneficios de Renault y pierde 338 millones en 2022

La compañía anunció un beneficio neto de 1.620 millones en sus actividades continuadas, que fue lastrado por el cargo negativo de 2.320 millones por la venta de sus operaciones en Rusia

La Factoría de Renault de Villamuriel de Cerrato (Palencia) tras las obras de transformación de la planta para fabricar el modelo Austral
La Factoría de Renault de Villamuriel de Cerrato (Palencia) tras las obras de transformación de la planta para fabricar el modelo AustralOLIVIER MARTIN GAMBIER omg.omg@wanadoo.frAgencia ICAL

La industria de la automoción lleva años enfrentándose a múltiples turbulencias, desde la pandemia del coronavirus hasta una crisis de suministros, lo que ha pasado factura al sector, lastrando los beneficios de muchas compañías. En este sentido, la multinacional estadounidense Ford anunció que en el año 2022 perdió 2.512 millones de dólares en todo el mundo, dejando muy atrás sus objetivos, y teniendo que recurrir al despido de parte de su plantilla en Europa.

Ahora es Renault, el grupo automovilístico francés, quién avanza que en 2022 tuvo unas pérdidas de 338 millones de euros, frente los 888 millones de beneficios que obtuvo un año antes, debido a la venta de sus operaciones en Rusia tras la invasión de Ucrania, tal y como ha anunciado este jueves la compañía.

A pesar de que Renault anunció un beneficio neto de 1.620 millones en sus actividades continuadas -frente a los 549 millones de 2021-, el cargo negativo de 2.320 millones por la venta de sus operaciones en Rusia lastró estas ganancias. Por tanto, los resultados son una pérdida neta de 700 millones de euros, de ellos 338 millones atribuibles al grupo.

Resultados superiores a los objetivos

Pese a estas pérdidas, el grupo considera que el conjunto de los resultados es muy positivo, encontrándose por encima de sus objetivos, ya que la facturación alcanzó 46.371 millones de euros (un 11% más) y el beneficio operativo llegó a los 2.216 millones (un 146% más), según detalló en un comunicado.

"En 2022 hemos pasado la página de la primera fase del plan" de reestructuración, afirmó el consejero delegado del grupo, Luca de Meo, en una presentación ante analistas financieros, a los que aseguró: "hemos salido de la sala de urgencias, estamos de vuelta".

Asimismo, el consejero delegado destacó el buen comportamiento de los todos los segmentos de actividad, ya que compensaron el "choque" de Rusia en tan solo siete meses. Los buenos datos económicos tuvieron lugar a pesar de que las matriculaciones bajaron un 5,9% en todo el año hasta 2,051 millones de unidades -excluyendo las cifras de Rusia-.

En este 2022, el grupo francés culminó en mayo la venta de su participación en el fabricante ruso Avtovaz (que tiene la marca Lada), unas acciones que en diciembre de 2021 tenían un valor de 2.190 millones de euros y que podrá recomprar dentro de una ventana temporal de seis años.

Asimismo, en 2022 las ventas del grupo en el mercado ruso totalizaron 482.000 unidades. Tras cerrar sus operaciones en Rusia, Renault destacó el buen resultado del resto de sus actividades, gracias sobre todo a un aumento del margen operativo (del 5,6%, el doble que un año antes), por el incremento de precios reales por la reducción de descuentos comerciales.

Además, el grupo Renault logró un flujo de caja récord de 2.119 millones de euros, frente a los 889 millones de 2021."Hemos ganado más dinero en los últimos dos años que en los diez anteriores", proclamó De Meo.

Tras el positivo ejercicio de 2022, Renault prevé continuar la mejora de sus cifras económicas, de forma que su margen operativo alcance el 8% en 2025 y el 10% en 2030. Asimismo, la firma espera que su flujo de caja sea superior a los 2.000 millones de euros anuales en el período 2023/25 y de más de 3.000 millones entre 2026/30.

Retorno al dividendo

Después de tres años sin dividendo por la pandemia y sus consecuencias, seguida de la crisis de los semiconductores, Renault propondrá una retribución de 0,25 euros por acción.

De Meo aseguró que no están preocupados por el aumento de los costes energéticos, ya que en los últimos años han recortado en un 14% la energía necesaria para producir sus vehículos.

El grupo dejó de vender unos 300.000 vehículos en 2022, por los problemas de suministro de semiconductores y las dificultades por la falta de suficientes camioneros para la distribución. La compañía calcula que estos problemas pueden impedir la entrega de entre 100.000 y 300.000 unidades durante el actual ejercicio.

"El año 2022 ha cumplido de sobras sus promesas, con resultados por encima de nuestros objetivos iniciales y de las expectativas del mercado", resumió De Meo.