Bienvenidos al invierno: la AEMET activa las alertas por lluvia intensa y nevadas

El paso de una nueva borrasca atlántica este viernes dejará precipitaciones que pueden ser localmente fuertes y que afectarán a toda España, incluidas Baleares y Canarias. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha puesto en aviso 16 provincias repartidas por nueve comunidades autónomas, así como Melilla, por fuertes rachas de viento, lluvia intensa, nevadas o mala mar. El fin de semana se prevé más estable pero frío, con noches gélidas y mínimas por debajo de los 6 grados o incluso más, antes de dar paso a unos días marcados por la llegada de borrascas que dejarán lluvia en el oeste peninsular y un ambiente más templado, con valores altos para la época.

Según la previsión de la Aemet, lo más adverso este viernes serán las lluvias localmente fuertes en Canarias, los intervalos de viento fuerte en los litorales del Cantábrico, el sureste peninsular, el bajo Ebro y Baleares, y las nevadas por encima de 800 a 1.200 metros en los Pirineos. Así, hay aviso amarillo -riesgo para actividades al aire libre- por rachas de 70 a 80 km/h en Alicante (litoral norte), Almería (litoral), Castellón (interior norte), Tarragona (sur) y Baleares (salvo el interior de Mallorca).

El aviso amarillo por lluvias persistentes o fuertes afecta a Córdoba, Sevilla y, a primeras horas, también a toda Canarias salvo la mitad norte de Gran Canaria. Además, Meteorología ha activado el aviso amarillo por nevadas que dejarán unos cinco centímetros de grosor sobre la superficie en Huesca (Pirineo) y Lleida (valle de Arán), y por fenómenos costeros en Alicante, Almería, Baleares, Cantabria, Granada, Guipúzcoa, Melilla, Murcia, Tarragona y Vizcaya.

La península y Baleares continuarán bajo una circulación atlántica con el paso de un frente por la mitad sureste y el archipiélago. Las precipitaciones afectarán a la mitad sureste, con tendencia a remitir, con lo que por la tarde se esperan solo en el extremo sureste, Melilla y Baleares. Asimismo, en el noroeste de Galicia se esperan lluvias que se extenderán al Cantábrico y que pueden afectar de forma más débil a zonas aledañas. En Canarias, con el paso de otro frente atlántico, hay probabilidad de precipitaciones y tormentas que se desplazarán de oeste a este, con tendencia a remitir a primeras horas. La cota de nieve bajará a entre 800 y 1.200 metros en los Pirineos, y se situará entre 1.000 y 1.200 metros en la Cordillera Cantábrica, el Sistema Ibérico y el Sistema Central.

Las temperaturas descenderán de manera acusada en todo el país, con una bajada notable de las mínimas en el interior de la mitad sureste, mientras que en Canarias bajarán ligeramente. Hará más calor en Melilla (26 grados), Murcia (24) y Almería, Ceuta, Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife (23), y más frío en Burgos y Palencia (8), y Ávila, Lugo, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora (9), informa Servimedia.

Las heladas recuperarán extensión e intensidad y afectarán a montañas y páramos de la mitad norte, sin descartarse en zonas más llanas de la meseta Norte y en las sierras del sureste. Soplarán vientos de componentes oeste y norte, llegando a fuertes en litorales del Cantábrico y Mediterráneo, y con rachas muy fuertes en interiores de los tercios este y sureste, así como en Baleares.

El sábado el frente ya habrá pasado y tenderá a estabilizarse la atmósfera. Únicamente persistirán los chubascos en Galicia, área cantábrica y Pirineos. En Canaria pueden producirse algunas precipitaciones débiles en el norte de las islas de mayor relieve. Amanecerá con heladas en amplias zonas del norte y este de la península, mientras que a mediodía en el interior las máximas rondarán los 10-12 grados y solo se superarán los 15 grados a orillas del Mediterráneo y en Andalucía Occidental, avanza Rubén Del Campo, portavoz de Aemet. En el extremo norte habrá nevadas débiles en una cota de nieve en los Pirineos algo baja, en torno a 600-800 metros.

De cara al domingo, un nuevo sistema frontal dejará un aumento paulatino de la nubosidad, con precipitaciones afectando al tercio noroeste en la segunda mitad del día. Se prevén lluvias en Galicia, Asturias y oeste de Castilla y León y nevará en zonas de montaña de la mitad norte peninsular, con acumulaciones significativas en cotas altas. Ese día habrá un nuevo descenso de las temperaturas nocturnas, por lo que las heladas serán "más extensas e intensas" que el día anterior: "En las dos mesetas se bajará hasta 2 o 4 grados bajo cero, en páramos de la zona centro hasta 4 o 6 grados bajo cero y en zonas de los Pirineos incluso por debajo de 6 grados bajo cero". Sin embargo, durante el día los valores serán un poco más altos que el sábado, pero todavía oscilarán entre los 10 y 15 grados en la mayor parte del territorio.

La próxima semana arrancará con precipitaciones en casi todo el país, salvo en el Mediterráneo, ha señalado Del Campo, quien ha destacado los vientos templados del sur y suroeste que soplarán en el este y norte de la península propiciando un "notable aumento de las temperaturas", sobre todo de las mínimas, que podrán ser hasta 6 u 8 grados superiores a las del fin de semana. El martes se espera un día "estable y tranquilo", con algo de lluvia en puntos de Galicia y del extremo norte y con unas temperaturas que no experimentarán grandes cambios.

A partir del miércoles festivo y días siguientes predominarán los vientos del oeste y suroeste, que "arrastrarán hasta España masas de aire atlánticas templadas y húmedas" dejando cielos nubosos en el oeste de la península y abundantes lluvias en Galicia. Estas precipitaciones podrán extenderse a otros puntos del territorio, sobre todo del noroeste peninsular como Asturias, Castilla y León y Extremadura. Las temperaturas subirán de forma clara, con un ambiente templado para la época del año y con máximas que desde el jueves podrían superar los 15 grados al mediodía en el centro, este y sur de la península, 20 grados en el Cantábrico y 25 grados en el área mediterránea