Defensa

Robles defiende una “España incluyente y grande en su diversidad”

La ministra hace un guiño a las asociaciones militares y muestra su apoyo a las tropas desplegadas en Irak “en momentos complicados” por la inestabilidad en Oriente Medio

La ministra de Defensa y Asuntos Exteriores en funciones, Margarita Robles, ha reclamado hoy, en su discurso con motivo de la Pascua Militar, que la Defensa ha de ser una “auténtica política de Estado de la que nadie pueda quedar excluida” y ha vuelto a pedir una “financiación suficiente y estable fruto del consenso de las fuerzas parlamentarias” para las Fuerzas Armadas. En un discurso poco político, a pesar de que esta celebración castrense tiene lugar en el receso de las votaciones de investidura, Robles ha aprovechado también para hacer un guiño a las asociaciones militares profesionales, a las que ha agradecido su contribución para “avanzar en la mejora de las condiciones profesionales”.

El discurso de la ministra ha sido el que ha abierto una Pascua Militar que, además de por la política, también está marcada por las tensiones en Oriente Medio y la situación de los más de 550 militares desplegados en Irak. A ellos se ha dirigido para mandarles “un especial recuerdo en estos complicados días. Les sentimos cerca y su seguridad es nuestro principal empeño. Admiramos su sentido del deber con la seguridad internacional” ha apuntado. En el plano de las misiones en el exterior, Robles ha confirmado que España mantendrá sus “compromisos con los organismos internacionales”. “España es y va a seguir siendo un aliado firme, serio y comprometido” tanto en la UE como la OTAN.

Pero sobre todo, ha hecho hincapié en varias ocasiones a la necesidad de que la Defensa sea una auténtica política de Estado. “Una característica de la Defensa es que desarrolla sus cometidos entendiendo la Defensa como política de Estado, buscando el consenso. Todos debemos estar unidos en el objetivo de tener unas Fuerzas Armadas adaptadas a los nuevos tiempos”. Destacando aquí la importancia de la industria nacional.

Pocos retos ha enumerado Robles, salvo la necesaria adaptación de los Ejércitos y la Armada a las nuevas tecnología y los nuevos escenarios. De hecho, esa modernización pasa por la necesidad de unos presupuestos estables y duraderos, por lo que ha destacado que el Gobierno “continúa con su esfuerzo en inversión” para adquirir nuevas capacidades militares, subrayando lo “necesario” de dotar de recursos a las Fuerzas Armadas.

En ese guiño a las asociaciones, Robles ha enmarcado sus principales retos en los aspectos que afectan al personal, señalando el “esfuerzo para lograr una política social en el seno de las Fuerzas Armadas”, sobre todo en temas como la conciliación o el impulso en materia de igualdad. Eso sí, ha dejado claro que “queda mucho por hacer. Que nadie dude de, que dentro de nuestras posibilidades, esos hombres y mujeres serán nuestra prioridad”.

Y en medio de la inestabilidad política y en un momento en el que la unidad de España está en entredicho ante el desafío soberanista catalán, la ministra ha querido hablar de España como un país “abierto y grande en su diversidad. Una España incluyente que exige la colaboración de todos”.