Gobierno

Yolanda Díaz, Escrivá, Laya y Campo corrigen a Iglesias: “España es un país democrático”

La ministra de Trabajo se aleja de la ofensiva del vicepresidente aunque pide “cuidar y mimar” las instituciones y el titular de Inclusión recuerda que España “destaca en las listas de democracias más plenas

PLENO DEL SENADO
Pablo Iglesias y Yolanda DíazFERNANDO VILLAREFE

La polémica abierta por el propio vicepresidente segundo del Gobierno por cuestionar el estado pleno de democracia en España ha vuelto a evidenciar las diferencias entre ambos socios de Gobierno. Además de crear un ambiente de malestar en el seno del Gobierno, hasta dentro de la cuota morada han hecho visible estas discrepancias y se han desmarcado de sus palabras.

Después de que Moncloa ayer justificara las declaraciones del vicepresidente enmarcándolas dentro del periodo electoral, hoy, ministros de distinto signo han querido desmarcarse públicamente. El ministro de Inclusión ha recalcado hoy queEspaña “destaca” en las “evaluaciones más rigurosas y prestigiosas” sobre los países con un mejor Estado de derecho por delante de, por ejemplo, Italia y Francia. Y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha asegurado que España “es un país democrático”.

Para Yolanda Díaz, en España se permite “votar con garantías”, aunque ha reconocido que existe una “reflexión” acerca de la “calidad democrática” del país. Así se ha expresado en una entrevista en la Televisión de Galicia donde la ministra del Gobierno se ha alejado de las declaraciones del también líder de Podemos, que cuestionó que en España hubiese una “situación de plena normalidad política y democrática”. Tras sus declaraciones, el partido morado ha salido a respaldar a su líder, publicando diversos videos en sus redes sociales en los que ahonda en supuestos aspectos de déficit de normalidad democrática, señalando, incluso, a los medios de comunicación.

Para Díaz, existe un debate sobre la garantía de “derechos fundamentales” y con el cumplimiento de “algunos elementos que hoy están puestos en cuestión”. Por ello, ha pedido cuidar y “mimar” las instituciones. De hecho, ha mostrado su “preocupación” después de haber mantenido una reunión con su homóloga francesa, con quien compartió una “reflexión”. “En Europa se preguntan cuál va a ser la calidad democrática tras esta crisis: ese es el debate que tenemos”, ha explicado.

Por su parte, Escrivá ha recalcado que España ocupa el puesto 19 de un total de 128 países analizados, por detrás de la República Checa y por delante de Francia, según el índice del World Justice Project. “España no es que sea una democracia plena, es que a mi me gusta objetivar todo en evaluaciones que hay sobre los países con mejores Estados de derecho (...). Es una realidad que no vale la pena”.

El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, también ha salido a defender la posición del Gobierno. Ha asegurado que “España es un Estado de derecho y una democracia plena”, al tiempo que destacó que el país refrenda esta condición “año tras año”. De hecho, el ministro se reafirma en el cumplimiento y respeto a las normas. “España cumple, siendo, por ello, un Estado de derecho y una democracia plena”.

Por su parte, el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha tratado de rebajar la tensión en el seno del Gobierno, asegurando que cree que ha habido una confusión al interpretar las palabras de Iglesias, y que, a partir de ciertos elementos de “anormalidad”, no se puede considerar anormal al conjunto de la sociedad democrática. Sin embargo, no cree que el vicepresidentepiense que está en un estado no democrático porque “no podría formar parte de un Gobierno que no es de un país democrático”.

Muy severa con las declaraciones del vicepresidente ha sido la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, quien ha asegurado que “la democracia en España es plena, es sólida y es fuerte”, algo que saben “los españoles que hemos conocido sistemas que no eran democráticos en el pasado”.

El ruido en los consejos de Ministros

Los ministros de Trabajo y de Inclusión han querido, sin embargo, restar importancia a las discrepancias en el seno del Consejo de Ministros. Para Escrivá se viven con una “normalidad considerable”. “Muchas veces lo he dicho: hay una brecha enorme entre lo que parece que ocurre y lo que es la vida cotidiana en los órganos de toma de decisiones”, ha añadido, para después achacar ese ruido a la falta de experiencia en España respecto a un gobierno de coalición. “Yo que he vivido en Alemania unos años... en periodos cercanos a las elecciones, si viera lo que se dice en busca de titulares en periodos electorales...”, ha sostenido.

La ministra de Trabajo ha asegurado que se siente cómoda en el Gobierno y ha relativizado también las discrepancias y las ha enmarcado dentro de la normalidad. “Ayer veíamos como eran dos ministros socialistas con discrepancias con el medio ambiente, las políticas animalistas. Quiero decir que en este año hemos tenido diferentes posiciones en que no coincidíamos con independencia de las marcas políticas. Yo he coincidido con ministros socialistas, y con otros no”, ha explicado.