Política

Convención del PP

Cospedal, en la inauguración: «En la defensa de España, es el PP o la nada»

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ayer durante su intervención en la Convención Nacional que se celebra en Valladolid
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ayer durante su intervención en la Convención Nacional que se celebra en Valladolidlarazon

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, abrió ayer la Convención Nacional de Valladolid con un discurso dirigido a unir las costuras de su partido y frenar en la militancia más conservadora el daño que hacen las críticas a la política antiterrorista y territorial, las ausencias de algunos referentes históricos o la creación del nuevo partido VOX.

La dirección nacional apeló ayer al espíritu de Manuel Fraga para reivindicar la unidad, interna y en el conjunto de España, en alusión al problema del desafío independentista de Cataluña. «Todos somos el PP», defendió la «número dos». Y mirando a las elecciones europeas del 25 de mayo, proclamó: «En la defensa de España, es el PP o la nada».

La economía estuvo en su mensaje, pero ayer el guión fue modificado desde el primer momento porque casi por encima de la «bandera» de la recuperación y de la salida de la crisis se colocó la del cierre de filas y el reclamo de la herencia del PP y de su papel como único garante de la defensa de la unidad España, e incluso del Estado del Bienestar. «El PP es un partido que sabe evolucionar y no está anclado, como otros, que miran al pasado. Es un partido en el que caben muchos y todos los que piensan que la democracia se asienta en la defensa de las personas», sentenció. Con clara intencionalidad, la secretaria general recordó a Mayor Oreja y también al presidente de honor, José María Aznar. «No ha podido acompañarnos, precisamente aquí, en Valladolid, y nos ha mandado un saludo a todos», subrayó. También mencionó a los populares vascos.

La secretaria general intentó cubrir todos los flancos. Así, en materia económica se deshizo en elogios hacia el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al que presentó como artífice de la salvación de España, el que ha evitado el «rescate», el que ha tomado las medidas necesarias para «salir de la quiebra en la que nos dejaron los socialistas» y como el garante de que el Estado del Bienestar siga estando garantizado en el futuro. Por ahí es, precisamente, por donde con más fuerza ataca la izquierda al PP ante la política de ajustes y de recortes implementada para cumplir con los objetivos de déficit impuestos por Bruselas.

Cospedal también se refirió al problema catalán. «Los españoles no quieren aventuras estrafalarias y extremas, sino un partido como el PP convencido de que la unidad nos hace más fuertes». Para añadir que no se puede vender ni negociar el derecho de todos los españoles a decidir.

En su extensa disertación, trufada de algunos elementos emotivos, presentó al PP como un partido «fiable», al que «las derrotas le hacen más fuerte», «con capacidad de no rendirse» y «que nunca se detiene».

En ese sentido, insistió en que los populares tienen más energía que nunca y están dispuestos a trabajar por los nuevos tiempos que vienen frente a los que se quedan en el pasado. «No nos van a derrotar porque hoy estamos aquí como hemos hecho siempre, dando la cara por los españoles y dando la cara por el partido», precisó.

Ayer, el mensaje oficial también reivindicó las reformas aplicadas por el Gobierno de Rajoy. Con mención especial para la reforma laboral, a la que se concedió protagonismo especial en un debate abierto en el que participó la ministra de Empleo, Fátima Báñez, que presumió de creación de empleo «estable y mejor remunerado», pese a las cifras de temporalidad y precariedad. «Había que tapar la sangría», proclamó. En estos foros de debate, los cargos del PP se hacen las preguntas y se dan las respuestas.