Siete de cada diez encuestados piensan, además, que los resultados de su aplicación han sido positivos para España.

El pasado 27 de octubre, tras más de seis horas de debate, el Senado aprobó la aplicación del artículo 155 de la Constitución sobre Cataluña. La puesta en marcha de esta medida fue una solución extrema para frenar el proceso independentista catalán. La decisión fue apoyada por el Partido Popular –con el respaldo de Foro Asturias y de Unión del Pueblo Navarro–, por el PSOE, por Ciudadanos y por Coalición Canaria. Cabe mencionar que Unidos Podemos, ERC, PNV y PDeCAT votaron en contra del control sobre Cataluña. El 155 supuso el cese del presidente de la Generalitat y de todo su Gobierno, la restricción de los poderes del Parlamento catalán, la intervención de organismos y servicios, además de la convocatoria de elecciones en un plazo de seis meses. El Gobierno destituyó a Carles Puigdemont y a todo su gabinete por «estar fuera de la ley y de la realidad». Nueve meses más tarde, el paso del tiempo ha permitido a los españoles formar una opinión sólida sobre los sucesos ocurridos en Cataluña. Seis de cada diez, un 67,7%, cree que la aplicación del 155 fue necesaria en Cataluña. Es más, un 74,8% piensa que sus resultados han sido positivos para la democracia de nuestro país.

Sin embargo, la entrada del PSOE en el Gobierno, liderado por Pedro Sánchez, hizo que el 155 decayera siendo ésta una de sus primeras medidas como jefe del Ejecutivo. Los encuestados no están de acuerdo con esta orden, ya que un 53,6% cree que debió prolongarse en el tiempo el control sobre Cataluña, comunidad sobre la que un 66,7% considera probable que vuelva a ser necesaria la reactivación del control en un futuro no muy lejano.