Vuelo bajo

¡Joder, qué tropa!

Si Ábalos, Koldo y Cerdán registraban sus conversaciones siendo amigos, ¡qué no habrán hecho con los que no son tan amigos y con los enemigos!

José Luis Ábalos y Koldo García, a su llegada al Congreso de los Diputados, en 2019.
José Luis Ábalos y Koldo García, a su llegada al Congreso de los Diputados, en 2019. Rodrigo Jiménez Agencia EFE

Ábalos, Koldo y Cerdán han dejado al descubierto que los socialistas de confianza de Sánchez se graban entre ellos, después de haber dado la vuelta a España juntos y de haber compartido Peugeot. ¡Con tantas confidencias y estrategias conjuntas, se graban entre ellos! ¡Qué tropa, joder, qué tropa!, diría Rajoy parafraseando al Conde Romanones.

Si registraban sus conversaciones siendo amigos de viajes, de trampas en el recuento de votos de las primarias, de compartir «sobrinas» y comisiones, ¡qué no habrán hecho con los que no son tan amigos, los que forman parte del Gobierno de coalición, los que son socios de investidura y con los enemigos!

¿Grabó Cerdán conversaciones con Puigdemont? ¿Lo hicieron Koldo y Ábalos con otros miembros del Gobierno? Y lo más importante, ¿existen grabaciones de Pedro? Siete años de mangoneos para contentar a propios y ajenos, presentándose como víctima de un complot de la derecha cuando el complot era provocado por los amigos que no vinieron a gobernar, sino a aprovecharse del Gobierno.

La soledad que viste el presidente, acompañado solo del maquillaje, es demoledora. Apareció triste y maquillado para vendernos que había conseguido engañar a la OTAN y a Trump, ¡nada menos!, para contentar a los socios de la ultraizquierda. Incluso ha usado al Consejo de Ministros para hacer imposible la OPA del BBVA al Sabadell para apaciguar a los independentistas.

Con la soledad y el maquillaje como acompañantes se presentó en la Cumbre de la OTAN con «el rabo entre las piernas» tras destaparse el engaño por el secretario general Rutte, ser señalado por Trump y ridiculizado por el primer ministro belga: «Si España es capaz de cumplir con el 5%, invirtiendo solo el 2,1%, Sánchez es un genio».