El magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha citado a los agentes de la Guardia Civil que elaboraron la pericial sobre los audios de Koldo García y también a los autores del informe que aportó Santos Cerdán, para el próximo 11 de diciembre. El instructor les convoca para que detallen las conclusiones de sus trabajos sobre las ocho grabaciones que encontraron en el registro del domicilio de Koldo García y que desvelaron aspectos muy relevantes para el procedimiento como el presunto reparto de mordidas.

El instructor del caso quiere saber si las conversaciones de los audios se grabaron directamente de los terminales de Koldo en los que se localizaron o bien pudieran proceder de otros archivos. El objetivo es, dice, descartar que este material probatorio pudiera haber sido objeto "de alguna clase de manipulación, corte o edición". "Existiendo, acerca de estos extremos, discrepancias entre los diferentes informes aportados a la causa, procede convocar a los expertos que emitieron aquéllos al efecto de que comparezcan ante el Tribunal a fin de aclarar, completar o precisar el resultado de sus pericias", expone.

Cabe recordar que los agentes del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil concluyeron que los audios de Koldo no estaban manipulados. En concreto, expusieron que no se habían identificado trazas que evidenciaran "alteraciones, manipulaciones o comportamientos anómalos" sobre estas pruebas que sirvieron de base para imputar a Santos Cerdán y también para impulsar la investigación por el presunto cobro de mordidas a cambio de amaños de obra pública del Ministerio de Transportes.

La Guardia Civil descartó manipulaciones

El Instituto Armado actuó a requerimiento del magistrado de la Sala Segunda que en julio pidió un examen de los audios ante las continuas alegaciones de los imputados sobre la presunta manipulación de las fuentes de prueba. Para realizar su trabajo, los expertos desglosaron la duración de las grabaciones y las fechas de codificación y de etiquetado. Los metadatos concluyeron que los archivos se habían grabado con la misma aplicación y que presentaban características propias.

No obstante, identificaron que la fecha de etiquetado de las grabaciones (el 18 de octubre de 2019) dista seis meses desde la fecha de grabación, lo que les llevó a concluir que los audios se etiquetaron todos a la vez, pese a que se grabaron en fechas diferentes. Además, explicaron que en el volcado de los audios registrados en una de las evidencias aparecieron "diez archivos más".

El peritaje de Cerdán

Por su parte, el exsecretario de Organización del PSOE presentó su propio peritaje de parte en el que apuntó al extremo contrario. El trabajo concluyó que no se podía sostener que las grabaciones que ocultaba Koldo García en su domicilio de Polop de la Marina (Alicante) no hubieran sido alteradas desde fuentes externas. De hecho, dijo que los audios presentaban "anomalías objetivas e incompatibles con un ciclo de vida digital nativo".

Además, el trabajo sembró la sospecha sobre la autenticidad de estas fuentes de prueba al sostener que presentaban desfases significativos entre el tiempo real de grabación y el tiempo de codificación. Del mismo modo, también se cuestionó la cadena de custodia de este material, deslizando que entre su incautación por parte de la Unidad Central Operativa (UCO) y su traslado al Tribunal Supremo se habría roto la cadena de custodia.