Política

El karma contable: el PP ve en la «caja B» del PSOE el fin de Sánchez

Nueva confluencia del mensaje de Feijóo y Ayuso: el presidente acabará sentado «en el banquillo»

El líder del PP, Alberto Nuñez Feijóo. Sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Comparecen el presidente del Gobierno Pedro Sánchez, María Jesús Montero, Yolanda Díaz, Félix Bolaños, Fernando Grande-Marlaska, Oscar Puente. Asisten por el PP Alberto Nuñez Feijoo, Ester Muñoz, Miguel Tellado, por Vox Santiago Abascal, y Gabriel Rufian (ERC). © Alberto R. Roldán / Diario La Razón. 10 09 2025
El líder del PP, Alberto Nuñez Feijóo, tras la sesión de control al GobiernoAlberto R. RoldánFotógrafos

«¿Y si la financiación ilegal del PSOE es la que acaba echando a Pedro Sánchez de la Moncloa?». De todos los finales posibles, los dirigentes del Partido Popular no tienen ninguna duda de cuál sería el más idílico. Una suerte de golpe del destino. Justicia divina. «El karma». El presidente del Gobierno que se hizo con el poder gracias a aquella moción de censura defendida por José Luis Ábalos, que mandó al patíbulo a Mariano Rajoy por la corrupción, bebiéndose ahora su propia medicina. Con la información que ya ha salido a la luz, en Génova hay cierta satisfacción por una suerte de venganza no buscada. El sino mismo.

A la espera de que las investigaciones judiciales sigan su curso, la percepción entre las filas peperas es que se acabará demostrando que el Partido Socialista se financió de forma ilegal. En el equipo de Alberto Núñez Feijóo apuntan a dos pistas, que en realidad son dos nombres, los de los dos últimos secretarios de Organización: José Luis Ábalos y Santos Cerdán. «Había una corrupción institucionalizada y sistemática». Como publicó LA RAZÓN, la pista por la que el PP rastrea la financiación es Servinabar, la constructora que compartía Cerdán con Antxon Alonso y que se benefició de contratos con la administración navarra, como los túneles de Belate.

Para el politburó gallego, todos los caminos conducen a una misma dirección. Y aunque todavía es pronto para llegar a conclusiones, hay una convicción total en la cúpula de que, tarde o temprano, se demostrará que las cuentas socialistas se enriquecieron con fondos procedentes de la corrupción.

El presidente popular alienta en los últimos días la idea de que Sánchez sigue en el poder solo, y nada más, que por «miedo». Así se lo espetó ayer, durante la sesión de control en el Congreso de los Diputados: «El miedo a los jueces, por lo que saben; el miedo a los medios, por lo que publiquen; el miedo a los socios, porque le dejen caer; el miedo a la gente, en las urnas. Quizás, también, el miedo a que, alguna vez, usted mismo acabe en un juzgado».

Con el nuevo curso, la actividad parlamentaria no ha sido la única en retomar la normalidad. Ha hecho lo propio la judicial. Y los nuevos informes de la UCO no han tardado en llegar. Este miércoles, nuestro diario abría sus páginas con unos mensajes que se cruzó Koldo García Izaguirre, el asesor estrella de Ábalos en el Ministerio de Transportes, con la vicepresidenta de Maduro. En el horno, queda una cantidad ingente de munición por salir, correspondiente a la compraventa de material sanitario. Y los populares enfocan los prismáticos hacia «Canarias y Baleares». Se especula desde hace tiempo que «Ángel Víctor Torres y Francina Armengol están en el alero».

Crece la expectación por lo que pueda suceder en las próximas semanas. Entre los escenarios que contempla Génova se encuentra el de un «estallido» de corrupción que haga saltar al Gobierno por los aires y fuerce a los aliados del mal llamado bloque progresista a «dejar caer a Sánchez». Entonces, las elecciones se adelantarían a otoño. Otra opción que vislumbran es que resista al temporal que se le viene encima y apriete el botón nuclear de las urnas en primavera. Lo que sí dan por sentado es que «él no será el candidato». Y que el tiempo que resta de legislatura será en balde. Sin agenda política. De tanto en tanto, fuego de artificio, como Gaza. Y poco más. Este miércoles, el primer pleno de la temporada culminó con una severa derrota: la reducción de la jornada laboral, medida estrella del ministerio de Trabajo, no logró los apoyos suficientes y fue rechazada por la Cámara Baja.

En todo caso, la agenda política ahora mismo queda en un segundo plano. Todo depende de los tribunales. Y el vaticinio de que Sánchez acabará sentado en uno de ellos no lo arrojó solamente Feijóo. También lo hizo Isabel Díaz Ayuso, con la que cada vez hay más sintonía en el mensaje. La presidenta madrileña acudió a los estudios de Antena 3, donde fue entrevistada por Susanna Griso en Espejo Público. Entre los muchos titulares: «Es Pedro Sánchez el que se va a sentar en el banquillo, porque es su fiscal, porque es su responsabilidad». En este caso, se refería a otra caso que afecta al presidente: el del fiscal general.