Artur Mas percibe un sueldo de 136.835 euros, un 75 por ciento superior al del presidente del Gobierno.

Después de los múltiples y sonados escándalos de corrupción que han salpicado a CiU y que han puesto en entredicho a referentes de la política catalana como el ex «molt honorable» Jordi Pujol, la Generalitat de Cataluña decidió asumir ciertas medidas de transparencia para restablecer de cara a la opinión pública parte de la credibilidad perdida. No obstante, la puesta en marcha del Portal de Transparencia y la publicación de los sueldos del Gobierno catalán han conseguido volver a poner de manifiesto la hipocresía de Cataluña que, mientras aplica políticas de recortes para sus ciudadanos, no acierta a reducir ni el elevado número de altos cargos que posee –casi 400– ni los salarios astronómicos que éstos perciben.

Según un informe realizado por Convivencia Cívica Catalana, de los 378 altos cargos y directivos de la administración autonómica, 239 ganan más que Mariano Rajoy. Entre ellos, destaca el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que percibe un sueldo de 136.835 euros, un 75% –58.650 euros– más que el jefe del Ejecutivo español.

Esta situación se hace extensiva también al equipo de Gobierno catalán, pues los consellers reciben un sueldo anual de 103.176 euros, un 50% más elevado que los ministros del Gobierno central. Los secretarios autonómicos siguen la misma dinámica y ganan un 23% más que los secretarios de Estado, mientras que los directores generales perciben un sueldo superior en un 54% a los directores generales de la administración estatal. En promedio, un alto cargo de la administración autonómica catalana cobra un 48% más que un alto cargo del Estado.

Si ahondamos en el análisis de las retribuciones, cabe destacar algunos ejemplos de aquellos afortunados que, por formar parte de la élite política catalana, cobran más de los 78.185 euros que percibe el presidente del Gobierno. Es el caso del polémico juez Santiago Vidal, recién nombrado director del Programa de Organización de la Administración de Justicia de Cataluña –84.078 euros–; el consejero de presidencia, Francesc Homs –103.176 euros–; el consejero de Economía, Andreu Mas-Collel –103.176 euros– o la imputada por la celebración de la consulta del 9-N Irene Rigau –103.176 euros–. Entre los altos cargos del Gobierno de Artur Mas llama también la atención la retribución de los «embajadores» de la Generalitat en EE UU y ante la Unión Europea, que supera, de nuevo, el sueldo de Rajoy.

También sorprende que mientras el discurso victimista de Mas defiende que «España nos roba» y denuncia una supuesta «asfixia financiera», Cataluña es la comunidad con la élite política mejor pagada de todo el territorio. La hipocresía del Gobierno catalán hace que mientras aplican recortes a sus ciudadanos no sean capaces de ajustar unos sueldos que superan a los de sus homólogos en el Estado y a nivel europeo. Convivencia Cívica Catalana también analiza los modelos retributivos de países como Francia, Italia o Alemania, naciones en las que en ningún caso los consejeros regionales cobran más que sus equivalentes a nivel estatal.