Iglesias y Errejón pactan en solitario un acuerdo de mínimos para Vistalegre

El número dos logra la victoria al «revivir» al fulminado Sergio Pascual para el equipo técnico

Podemos da por escenificado su acuerdo. Ayer, el Consejo Ciudadano Estatal (CCE), máximo órgano de dirección entre asambleas compuesto por cerca de 80 miembros- encargó a un equipo técnico la organización de los preparativos del próximo Vistalegre, que se celebrará en febrero.

El acuerdo fue pactado por el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias y su número dos, Íñigo Errejón, que durante un receso del CCE se reunieron en privado para formar el equipo técnico. En el acuerdo Iglesias tuvo que dar su brazo a torcer en favor de Errejón, que logró «revivir» a un fulminantemente cesado Sergio Pascual, que hacía las labores de secretario de Organización, cargo que en la actualidad ostenta Pablo Echenique.

Finalmente, hubo consenso, como celebró Echenique, y el equipo técnico estará formado por siete personas y tres suplentes. Errejón logró colocar también a otros dos afines: la responsable de Igualdad, Clara Serra y el ex diputado de Castilla y León, Pedro de Palacio, que dejó su cargo en las Cortes autonómicas al conocerse su condena en 2002 –con 17 años– por abusar de una menor. Mientras que Iglesias designó al diputado Juanma del Olmo, el secretario de Organización Pablo Echenique y la responsable de política editorial, Ana Domínguez. Los anticapitalistas por su parte, han conseguido sólo que un representante forme parte del equipo técnico, Manuel Gari.

Como ya había avanzado Iglesias antes de que comenzara la reunión «histórica» –como la definió– todo estaba ya preparado. Sólo quedaban algunos flecos que concretar, que fueron acordados en la reunión privada que mantuvo con Errejón. El número dos de Iglesias también peleó para que el censo para que los militantes puedan votar en los referendums sea abierto, aunque es una victoria mínima puesto que aunque con este nuevo acuerdo el censo se mantendría abierto hasta Vistalegre, son ahora los inscritos los que deberán decidir en el referéndum que se puede votar desde hoy y hasta el martes, si el censo será abierto, entre otras propuestas.

Este Consejo Ciudadano aprobó también una medida que echa por tierra las tesis errejonistas. El debate presencial que se celebrará en el mes de febrero no tendrá casi influencia en las votaciones del cónclave puesto que este proceso se cerrará 24 horas antes de que Iglesias se proclame como secretario general del partido , que será coincidiendo con la proclamación del líder popular, Mariano Rajoy, el domingo 12 de febrero. Según explicó Echenique tras finalizar el CCE, será el sábado por la tarde cuando se cierren las votaciones. Por tanto, parte del debate presencial del congreso –concretamente la tarde del sábado y la mañana del domingo– se llevará a cabo una defensa de proyectos que no podrá ni siquiera influir en el voto de las bases de Podemos.

Echenique, que fue el encargado junto a la secretaria de Igualdad, Clara Serra de hacer público el equipo técnico, explicó que Iglesias y Errejón se habían puesto de acuerdo «en algunas cosas», en referencia a la reunión privada de ayer, pero que ha sido el Consejo Ciudadano el que ha debatido y aprobado la composición del nuevo équipo técnico. «Es un acuerdo del Consejo, no es un acuerdo entre Pablo e Iñigo. De hecho, hay más gente que los equipos de Pablo e Iñigo», explicó. A las preguntas sobre la inclusión de personas como Pedro Palacio en el equipo técnico, –que no forma parte del CCE, o Manuel Gari–, Echenique respondió que no era el día «de sacarle punta a un acuerdo muy agradable». Para el secretario de Organización el resultado de este acuerdo demuestra que se pueden poner de acuerdo «más allá de diferentes puntos de vista y de opiniones» que «afortunadamente» hay en Podemos.

Ante la poca representatividad de la corriente anticapitalista en el equipo técnico, el eurodiputado y cabeza visible del sector, Miguel Urbán, aseguró que hubiera preferido que el equipo técnico elegido para organizar la Asamblea Estatal del partido que se celebrará en febrero fuese «mucho más representativo», informa Ep.

El líder avisa de que deben desaparecer las familias

Cierre de filas en torno a la figura de Pablo Iglesias. O eso al menos es lo que el secretario general de Podemos exigió ayer a sus consejeros en la reunión del Consejo Ciudadano Estatal: que tras el cónclave de febrero, cesen las corrientes dentro del partido. Podemos no puede convertirse en un «campo de batalla», ni tampoco se deben mantener «corrientes irreconcilibles», avisó. También hizo autocrítica sobre la trayectoria de su partido y explicó que Podemos debe corregir la exclusión de las minorías de la dirección del partido y también la vinculación «a la figura del secretario general». Además, apostó por acabar con «la máquina electoral» en favor de la «máquina de oposición popular».