Comparecencia

Sánchez lanza el apagón contra las nucleares sin esclarecer sus causas

Acusa a la oposición de "pontificar" y "vender su espíritu crítico" a los intereses del "mejor pagador"

Pedro Sánchez sigue sumido en la total oscuridad sobre las causas que provocaron el apagón eléctrico en España el 28 de abril. El presidente del Gobierno ha acudido esta mañana al Congreso de los Diputados para informar sobre las últimas novedades al respecto y lo ha hecho con un discurso vacío de contenido concreto, sin datos concluyentes que poder aportar todavía, y sin anuncios para el refuerzo de un sistema que se fue a negro durante 12 horas.

A falta de información esclarecedora sobre el cero eléctrico de hace 10 días en España, el jefe del Ejecutivo se ha ocupado de hilvanar -durante casi una hora- un discurso triunfalista en la respuesta al siniestro; reivindicando la fortaleza del sistema eléctrico español, "uno de los más seguros y garantistas", ha dicho; así como defendiendo su modelo de transición ecológica, demonizando a las nucleares y criticando a la oposición por "pontificar" mientras se vende al "mejor pagador". "Frente a la visión apocalíptica y catastrofista de los que nunca creen en España, la sociedad española demostró su grandeza".

En el Gobierno piden "tiempo" para poder aclarar qué ha ocurrido, porque, según Sánchez, los "técnicos" van a necesitarlo "para hacer bien su trabajo". "Nuestra responsabilidad es dárselo, respetar la complejidad del asunto y no aprovechar para alimentar debates interesados como están haciendo algunos", ha señalado el presidente, adoptando un discurso victimista para quejarse de que "los mismos que acusan al Ejecutivo de no dar información, son los que reclaman una solución, que consiste en su agenda ideológica y en los intereses de algunas empresas con propiedad en las centrales nucleares. No presentan datos, ni pruebas, solo pontifican con la certeza de quienes no entienden nada o no quieren entender, porque han vendido su espíritu crítico un buen pagador".

El calendario que se maneja en Moncloa cuenta con el amplio margen que se dan en la Unión Europea, donde ya avanzan que les llevara hasta seis meses tener un diagnóstico certero de lo ocurrido. En este sentido, el Gobierno huye de las urgencias y se abona ahora, después de señalar a los "operadores privados", a la "prudencia, el rigor, la transparencia y la colaboración con las empresas eléctricas". "Todos los actores involucrados están trabajando para saber qué provocaron esas oscilaciones. Si fueron fenómenos independientes o estaban relacionados. Todo lo que descubramos se va a hacer público con absoluta transparencia", ha asegurado.

De este modo, hay que analizar 756 millones de datos, y en el Ejecutivo se aferran a que para llegar al "fondo del asunto" y no "cerrarlo en falso" hace falta un análisis riguroso y no "precipitarse" en las conclusiones, huyendo de las soluciones interesadas para hacer "nuestro sistema aún más fiable". Sobre estas soluciones interesadas, Sánchez ha rehuido un debate binario entre renovables o nucleares. "Vincular el debate a las nucleares es irresponsable y una manipulación", ha dicho, para aseverar que: "El futuro será verde o no será", ha zanjado el presidente.

Ataque a Feijóo

Ya en tiempo de réplica, tal como avanzaban fuentes gubernamentales, Sánchez redobló la intensidad de su discurso para atacar los argumentos que Alberto Núñez Feijóo había planteado en su primera intervención. El presidente se ocupó en dibujar al PP como un partido carente de sentido de Estado, abonado a generar "zozobra" y que no defiende el interés general, sino el de los poderosos. "Su política no sirve para animar y unir a la ciudadanía. Sirve para sembrar zozobra", ha señalado, asegurando que los populares "agitan la bandera del caos" para, "en lugar de condenar, pedir calma sosiego a la ciudadanía se dedica a echar más leña al fuego".

El presidente ubicó al líder de la oposición en el catastrofismo y se preguntó "qué aporta usted en esta clase de circunstancias", en relación al apagón o al caos ferroviario. "cada vez que hay una crisis no ayuda, usted trata de amplificarla. Es una oposición destructiva, siempre se suma al problema, nunca a la solución. No pueden soportar que España le vaya bien", ha criticado, para terminar su intervención, sentenciando: "España no necesita políticos al servicio de los poderosos, necesita políticos valientes al servicio del interés general".