Opinión

Tonterías con realce

En el actual gobierno la falta total de coherencia, las conductas o expresiones que se contradicen con otras, se ha convertido en una costumbre

Yolanda Díaz y Carles Puigdemont
Yolanda Díaz y Carles PuigdemontLa RazónLa Razón

Hay dos cosas que en política deberían estar prohibidas, la incongruencia y la estupidez sistemática. Uno puede cambiar de opinión alguna vez, puede hacer o decir una estupidez, pero no constantemente. En el actual gobierno la falta total de coherencia entre varias ideas o acciones, las conductas o expresiones que se contradicen con otras, se ha convertido en una costumbre.

El escritor francés Michel de Montaigne decía que «nadie está libre de decir estupideces, lo malo es decirlas con énfasis». Pensamiento que me parece el mejor retrato de la vicepresidenta Yolanda Díaz porque las tonterías que dice, las dice con realce. Graba el vídeo «Un día con Yolanda» y sale planchando porque le ayuda a concentrarse y a relajarse, lo que me lleva a pedirle el uso más a menudo de la plancha para ver si se concentra y empieza a ser consciente de que hay que defender las democracias de los ataques terroristas.

Otra tontería con realce, dicha por Yolanda, ha sido afirmar que, como el mundo se va al «carajo», los inmensamente ricos se están construyendo cohetes para huir de la tierra.

La última conocida y dicha con realce ha sido pavonearse de que las madres y los padres del colegio público de Madrid donde su hija estudia le dan las gracias porque saben lo que ella está haciendo (entrevista con Puigdemont en Bruselas). No faltó tiempo para que las madres y padres del colegio público de Madrid, ciudad y comunidad donde el PP tiene mayoría absoluta, salieran en tromba a desmentir tal suceso y dejar en evidencia la tontería con realce.

Otro escritor francés, La Fontaine, decía que «todos los cerebros del mundo son impotentes contra cualquier estupidez que esté de moda». Me niego a que la incongruencia, la estupidez y las tonterías con realce estén de moda y nos quedemos impotentes.