Vara y Lambán obligarán a Feijóo a retratarse con Vox

Nuevo giro de guion. Pedro Sánchez ha dado una patada al tablero con la convocatoria anticipada de elecciones para el próximo 23 de julio y ha espoleado a todos los actores. Quienes se batían en retirada desandan ahora sus pasos y quienes se veían ungidos en la noche electoral tendrán –al menos– que pagar un precio por el poder. El PSOE no está dispuesto a entregar al PP sus feudos territoriales sin que Alberto Núñez Feijóo se retrate en los pactos con Vox. Desde la dirección hubo una llamada a rebato a sus dirigentes para que aguanten, den la batalla y trasladen la sensación de que hay partido hasta el 23-J. El debate sucesorio se ha frenado y líderes como Ximo Puig se quedará, de momento, a liderar la oposición.

Javier Lambán (Aragón) y Guillermo Fernández Vara (Extremadura) oficializaron ayer su intención de presentarse a la investidura para intentar gobernar. El extremeño lo hace con la legitimidad de ser la lista más votada, después de que la candidata del PP, María Guardiola, le pidiera abiertamente su abstención para no depender de Vox. El aragonés, que fue segunda fuerza, está dispuesto a tejer una mayoría de gobierno alternativa a la de Jorge Azcón. El movimiento simultáneo, después de la celebración de las ejecutivas de los partidos en las dos regiones, obedece a la vocación del partido de seguir dando la batalla hasta el final y con las generales en el horizonte. No hay garantías de éxito, porque tanto Guardiola como Azcón tienen a su alcance una mayoría suficiente con Vox para desalojar al PSOE, pero para ello tendrán que retratarse.

El caso más simbólico del cambio de tercio que ha supuesto el adelanto electoral lo representa Fernández Vara. El líder extremeño pidió el lunes su solicitud de reingreso en su plaza de médico forense en el Instituto de Medicina Legal de Badajoz, dispuesto a abandonar la política. Sin embargo, tras el anuncio de Sánchez, decidió primero suspender la decisión y ayer dar un paso adelante y presentarse a la investidura. «Que nadie tenga ninguna duda, como ganadores de las elecciones autonómicas, vamos a intentar gobernar Extremadura. Es lo que tenemos que hacer como partido que ha ganado las elecciones municipales, autonómicas y las dos diputaciones», aseguró en rueda de prensa.

En paralelo, desde Aragón, se reunía la dirección del partido oficializando su disposición a conformar una mayoría alternativa de gobierno que supere los 28 escaños obtenidos por el Partido Popular tras la renuncia de Jorge Azcón a gobernar con Vox. «Si el PP, que tiene 28 escaños, es incapaz de conformar una mayoría, nosotros estamos en disposición de sumar más diputados y una alternativa de gobierno». El PSOE puede llegar a los 32 escaños sumando sus votos (23) a los del CHA (3), Aragón Existe (3), Podemos Alianza Verde (1), IUA (1) y el PAR (1).

Sin embargo, pese a que finalmente se consiga visibilizar la alianza entre el PP y Vox, el movimiento tanto de Fernández Vara como de Lambán de tomar la iniciativa y presentarse a la investidura retrasará la foto del pacto de derechas hasta después de las generales. No obstante, en el partido siguen percutiendo en con la idea de asimilar a ambos partidos. «PP es Vox», dicen.