Ola de incendios

Galicia estabiliza el segundo mayor incendio de su historia y mantiene sólo dos fuegos activos

El gran frente de Chandrexa de Queixa y Vilariño de Conso, con 19.000 hectáreas afectadas, queda bajo control, mientras los operativos se centran en Avión y Carballeda de Valdeorras

Galicia comienza la semana con un respiro en la larga ola de incendios forestales que ha devastado decenas de miles de hectáreas en las últimas dos semanas. La Consellería de Medio Rural confirmó este lunes que el incendio de Chandrexa de Queixa y Vilariño de Conso, el segundo más grande de la historia de la Comunidad, ha quedado estabilizado en su totalidad desde las 13.01 horas. Con más de 19.000 hectáreas arrasadas, este fuego ha afectado también a los municipios de Manzaneda, Montederramo, A Pobra de Trives, O Bolo y Laza, y ha requerido la movilización de más de 600 efectivos y el apoyo de la Unidad Militar de Emergencias.

Con este avance, Galicia mantiene activos únicamente dos incendios de más de 20 hectáreas, ambos en la provincia de Orense, que continúa en Situación 2 desde hace dos semanas. Se trata del fuego de Carballeda de Valdeorras, en la parroquia de Casaio, que se propagó desde la vecina Zamora y ya afecta a unas 4.700 hectáreas; y del incendio de Avión, iniciado este domingo en la parroquia de Nieva, que ha calcinado alrededor de 90 hectáreas.

Control en Vilaboa y Carballedo

La jornada de este lunes dejó también otra noticia positiva: el incendio de Vilaboa, en la parroquia pontevedresa de Santa Cristina de Cobres, quedó controlado tras calcinar unas 70 hectáreas y obligar a activar el nivel 2 de emergencia por su cercanía al núcleo de Vilar. En Lugo, el fuego de Carballedo, que había obligado a decretar la Situación 2 por la amenaza sobre el núcleo de Oleiros, se dio por controlado después de arrasar unas 100 hectáreas.

Grandes incendios estabilizados

Además de Chandrexa, otros grandes fuegos permanecen estabilizados en Ourense. Entre ellos, el de Larouco, con más de 30.000 hectáreas; el de Oímbra y Xinzo de Limia, con 17.000; el de A Mezquita, con 10.000; el de Carballeda de Avia y Beade, con 4.000; y el de Vilardevós, con unas 900 hectáreas. En total, las cifras consolidan una de las campañas más devastadoras de los últimos años en la comunidad.

La magnitud de los incendios ha obligado a un despliegue masivo de medios. Sólo en el frente de Chandrexa y Vilariño se movilizaron 23 técnicos, 168 agentes, 227 brigadas, 120 motobombas, 19 palas, 34 helicópteros y 29 aviones, además de unidades técnicas de apoyo y efectivos de la UME. Situaciones similares se repiten en otros grandes focos, donde la suma de brigadas y recursos aéreos alcanza cifras históricas.