Isabel Pantoja arrasa por donde pasa y se lleva hasta las almohadas de los hoteles

Los caprichos de Isabel Pantoja le salen caros a la productora de Idol Kids. La cantante se habría tomado libertades llevándose todo lo que se la antoja y exigiendo que se le paguen transportes y todo tipo de gastos. Es una auténtica diva y se comporta como tal. Sus caprichos no tienen límite y a la organización del concurso en el que participa le está pasando factura y más de un dolor de cabeza.

Pide taxis cuando los necesita e incluso ha llegado a solicitar servicios a cuenta de la productora estando en su casa de Cantora. Hay que recordar que moverse de Cantora a Jerez o Sevilla, las poblaciones de mayor número de habitantes más cercana a su finca y a las que suele ir, conllevan una tarifas importantes por cada carrera que no bajarían de los 80 euros.

Pero no sería la única exigencia, los trajes y complementos que se eligen para que ella luzca en las galas, se los queda. No sería la primera vez, en alguna revista guardan un mal recuerdo de la cantante ya que se llevó los bañadores que usaron los estilistas para aquel famoso reportaje. La excusa: eran prendas muy íntimas.

De todas sus excentricidades las que más ha sorprendido son las que tienen que ver con el hotel en el que se alojaba. Nos confiesan que hubo una cuenta pendiente importante en la que reflejaba que se habría llevado hasta las almohadas de la cama. El capricho se justificó con la excusa de que son perfectas y muy cómodas para conciliar el sueño, un problema que arrastra la cantante.

Lo cierto es que tanta exigencia y tanto imprevisto está empezando a molestar entre los responsables de las cuentas. Isabel Pantoja se justifica diciendo que todo lo que hace está recogido en su contrato y que nadie se atreve a plantarle cara porque saben que es el gran fichaje de la cadena.