Isabel Pantoja

Kiko Rivera estalla en «Sálvame»: «Lo que necesito es a mi madre, no a Isabel Pantoja. Y mi madre no está»

El joven ha hecho unas durísimas declaraciones sobre su madre y asegura que solo quiere defenderse de las acusaciones de ser un mantenido

Isabel Pantoja y Kiko Rivera durante la emisión de “GH Dúo”
Isabel Pantoja y Kiko Rivera durante la emisión de “GH Dúo”larazon

El hijo de Isabel Pantoja ha dado un bombazo hoy en «Sálvame». Hace unos días, aparecía en el «Deluxe» hace unos días para confesar que lo estaba pasando mal y estaba triste, y para aclarar también posibles problemas de pareja en su relación con Irene Rosales. Pero aquel día, las cosas cambiaron de tercio inesperadamente cuando su madre entró en directo por teléfono y expresó su malestar por la confesión que estaba haciendo. No entendía la tristeza de su hijo y, mucho menos, que fuera a un plató a contarlo.

Desde entonces, el tema ha ido derivando en dos cuestiones: los problemas económicos de Kiko y su posible dependencia de Isabel Pantoja en este sentido, ya que ha habido quien ha asegurado que es ella la que le mantiene y le salva de sus deudas. Harto de que su madre hable con distintos periodistas para que verbalicen su versión, Kiko ha dicho basta estar tarde. Y lo ha hecho en directo, en «Sálvame», a través de una llamada telefónica a Rafa Mora. El joven ha sido tajante.

«Le dije que si hacía falta vender Cantora para solucionar sus problemas y los míos, no había problema»

«Lo primero que quiero decir es que yo no necesito más de lo que tengo. Sí que es verdad que ha habido momentos en mi vida que he tenido más dinero que ahora, pero eso no significa que ahora sea más infeliz que antes, incluso con el mal bache que estoy pasando. No necesito más de lo que tengo».

Otra cosa –continuaba Kiko Rivera–: si yo quisiera pedir la herencia de mi padre, estoy en todo mi derecho, como cualquier persona. Segundo: yo no lo he pedido la herencia a mi madre. Lo que le dije fue que para solucionar sus problemas y los míos, que son más pequeños, que si hacía falta vender Cantora, por mi parte no habría problema. Y que podía coger para ella lo que a mí me tocaba. Que con que a mí me diera para pagar y resolver mi problema, no quería más. Tercera: llevo trabajando desde los 18 años. Que porque no trabaje en una oficina ocho horas, no significa que no trabaje. Por supuesto que trabajo. Si no, no habría podido pagar mi deuda con Hacienda. ¿No creen? ¿O el dinero llueve del cielo? El dinero no llueve del cielo, por lo tanto no soy ningún mantenido. Ni lo he sido ni lo seré. Y si algún día me tengo que poner a limpiar suelos o lo que haga falta por a mi familia, lo haría. Y que mi tristeza interior viene porque la persona a la que más amo del mundo, y he amado, que es mi madre, no sabe diferenciar entre Isabel Pantoja y madre. Esa es mi tristeza».

En ese momento, de fondo, se oían en plantó distintas voces de algunos de los colaboradores habituales del programa, como Kiko Hernández y Antonio David: «Qué grande Kiko, qué grande», decían, «Magistral». Rafa Mora pasaba entonces el teléfono a Paz Padilla, conductora del programa de hoy, para que ella retomara la entrevista. Con mucha calma, Paz le ha preguntado por la declaración más dura que acababa de hacer: si su verdadero problema estaba en la relación con Pantoja. Kiko pasaba a aclarar entonces, y las bombas se multiplicaban por momentos.

«A mí no me mantiene mi madre desde que cumplí 18 años estoy trabajando, Paz –sentenciaba–. Si no, no habría podido pagar mi problema con Hacienda. Mi madre me ha ayudado. Me ha ayudado. En momentos determinados. Eso no significa que me lleve manteniendo 37 años. Yo no soy ningún mantenido. Y si yo quisiera pedir lo que me corresponde de la herencia de mi padre estaría en mi derecho. Pero no es así».

«El personaje de Isabel Pantoja siempre es más que el de mi madre»

Sobre la venta de Cantora, Kiko aseguraba que era un tema que se había hablado varias veces: «Se lo he planteado muchísimas veces. Porque hay que vivir el presente. Y si por malas gestiones, yo ya no me meto, uno ha cometido sus errores, de poder con la venta de una finca ayudar a que la familia esté bien, pues se debe hacer. Porque de recuerdos no se debe vivir. Los recuerdos los tienes que tener dentro, con cariño y con amor. Y no voy a entrar en más cosas porque yo solo me estoy defendiendo ante todo lo que se está diciendo de mí porque no es cierto», trataba de zanjar.

Paz Padilla insistía, y aunque al principio Kiko aseguraba que quería quedarse cosas para su intimidad, rompía a hablar de nuevo: «Es muy triste que desde el día en que fui al ‘Sálvame Deluxe’ hasta que mi mujer cogió la Covid pasó una semana, una semana entera. Y sí, recibí la llamada de mi madre, pero le dije que viniera el lunes y ese lunes no llegó. Entiendo perfectamente sus motivos, está cuidando a mi abuela. Pero el día tiene 24 horas y vivimos a una hora y media».

Kiko aseguraba a continuación que no quería que su madre pensase que la estaba atacando, porque eso ya se lo había dicho personalmente a ella, pero también afirmaba que la que había convertido esta polémica en suya había sido ella misma: «No tengo por qué ser yo el que queda mal, ya estoy harto, yo siempre he defendido a mi madre con la capa y con la espada. Pero cuando fui al ‘Deluxe’ yo no estaba hablando de mi madre, jamás me he sentado a hablar de mi madre, no necesito hablar de mi madre. Lo que necesito es a mi madre, no a Isabel Pantoja. Y mi madre no está. Porque el personaje de Isabel Pantoja siempre es más».