El rey Guillermo de los Países Bajos cumple hoy 58 años, aunque fue ayer cuando tuvo lugar la tradicional celebración del Día del Rey en una jornada marcada por el funeral del Papa Francisco. No fue una decisión fácil, según expresó el propio monarca, pero finalmente la Casa de Orange-Nassau decidió mantener la agenda prevista.

No obstante, el recuerdo del Papa Francisco estuvo presente en los corazones de la Familia Real. "Hemos estado deliberando durante mucho tiempo. Finalmente, al empezar el día hicimos una pausa para reflexionar sobre el funeral", declaró ayer en su discurso. "El sentido de comunidad del Papa Francisco será también una característica del Día del Rey".

La esencia de la vida

El monarca definió la jornada como "un día de dos mitades" por el vínculo afectuoso que tanto él como su esposa, la reina Máxima, mantuvieron con el pontífice, "un hombre que abrazaba a todos desde su fe". En su discurso remarcó cómo Francisco consiguió "dar en el clavo" del verdadero significado de la vida: "el amor, la humanidad y el cuidado de los unos a los otros".

En esa esencia, encontró un nexo de unión entre el Papa y el popular Día del Rey: el espíritu comunitario. "Por eso nos parece tan valioso estar aquí hoy. Esto cobra mayor importancia en estos tiempos de tensión e incertidumbre en el mundo que nos rodea. La libertad, la igualdad y la seguridad jurídica no son evidentes. No pueden existir sin el compromiso activo de cada uno de nosotros. En el Día del Rey, un día festivo de conexión, somos aún más conscientes de ello".

Tras conocer el fallecimiento, los reyes de los Países Bajos expresaron su "profundo pesar". "Recordamos con cariño nuestros encuentros personales con él, incluso durante nuestra visita de Estado a la Santa Sede en 2017. El Papa Francisco irradiaba misericordia en todo", escribieron.

Una hora y media de respeto

Los festejos en Doetinchem, un municipio ubicado en la provincia de Güeldres, arrancaron este año una hora y media más tarde de lo habitual por respeto al funeral, que comenzó a las diez de la mañana en la Plaza de San Pedro en Roma.

La Familia Real fue recibida por el alcalde de esta localidad, Mark Boumans, y a continuación la banda Normaal tocó en honor al rey Guillermo Alejandro "Oerend Hard", una pieza musical muy conocida en el país a la que se unió el monarca.

Los reyes y sus tres hijas participaron en las actividades organizadas, como una partida de tenis de mesa en la que el rey desafió a su esposa. Aunque anotó varios puntos a su favor, el ganador del concurso Día del Rey fue el equipo de Máxima, después de una tanda de penaltis.