Pruebas

Elena Tablada puso un detective a Javier Ungría al final de su matrimonio

La empresaria siguió los pasos de su exmarido durante un tiempo en busca de información

Javier Ungría y Elena Tablada
Javier Ungría y Elena TabladaGTRES

Aunque en un principio su separación parecía amistosa, desde que Elena Tablada y Javier Ungría pusieron fin a su "idílico" matrimonio mantienen una guerra mediática y judicial, motivada por la custodia y el bienestar de Camila, la única hija que tienen en común. Durante meses se han lanzando constantes acusaciones e indirectas contra el otro y, de momento, parece ser que no están por la labor de firmar la paz.

Y ahora ha salido a la luz que Elena Tablada, al final de su matrimonio con Javier Ungría, cuando estaban atravesando una fuerte crisis sentimental, puso un detective al empresario. Así lo desveló en exclusiva el periodista Daniel Carande en "Y ahora Sonsoles".La ex de David Bisbal contrató a un profesional del espionaje para que siguiera las pistas de su marido (por aquel entonces) para comprobar si le estaba siendo infiel y utilizar esas pruebas en un posible juicio contra él por la custodia de la menor. "Fue durante los últimos coletazos de su relación", desvelaba Carande.

Elena Tablada y Javier Ungría durante unas vacaciones en Ibiza
Elena Tablada y Javier Ungría durante unas vacaciones en IbizaGSLVGTRES

Pero para sorpresa de Elena Tablada, las pruebas que consiguió no fueron las deseadas y, tal y como confesaba el colaborador, las fotografías "no demostrarían nada". En ellas, aparecía el empresario hablando con algunos hombres y un par de camareras, tal y como explicó Carande. Beatriz Cortázar, al escuchar la información de su compañero, quiso desmentir que la ex de Bisbal estuviera preocupada por una posible infidelidad, asegurando que "ese era el menor de sus problemas. Es un tema más delicado que eso, del que no se puede hablar".

Lo cierto es que, sea o no ese el motivo por el que contrató a un detective, Elena Tablada no iba mal encaminada y, finalmente, se tendrán que ver las caras en los tribunales. El pasado 15 de junio debería de haberse celebrado el juicio pero, por no haber juez, fue cancelado. Aunque no tienen fijada otra fecha, tarde o temprano acabará celebrándose la cita judicial por la custodia de la pequeña Camila.