Ivonne Reyes se enfrentó anoche a una de sus entrevistas más duras. Fue en el plató de ¡De viernes! y dejó grandes titulares. "Me quedé sin nada. He tenido que pedir 10 euros para poder comer". La entrevistada detallaba su situación actual después de confesar esta misma semana a la revista "Lecturas" que está "arruinada y en tratamiento psiquiátrico" debido a una profunda depresión. Según explicó, el inicio de su caída fue la pandemia. "A partir de la pandemia tuve el quiebre. Estuve a punto de morir por una septicemia y desde ahí fue muy difícil volver. Estaba desganada, sin ilusión y energía", añadió.

Durante la entrevista, la actriz venezolana se sintió incómoda cuando los colaboradores sacaron a colación la relación de su hijo con Pepe Navarro. Amenazó con abandonar el plató si volvían a preguntarle por ello.

Solo unas horas después, ha sido el comunicador quien, por alusiones, ha reaparecido para aclarar cada una de las afirmaciones que ofreció Ivonne en el programa. Antes de nada, ha asegurado que desearía hacerse la prueba de paternidad para por fin poner punto final a este episodio que lleva en los medios de comunicación tantos años como los del joven, 24."Lo ofrecí hace 10 años y yo estoy dispuesto a hacerla cuando haga falta para que se quede zanjado y que legalmente sea también así".

¿Saldrá la verdad?

Está dispuesto a aceptar las condiciones con las que Ivonne se sienta con confianza. "Vamos donde ella diga y naturalmente habría que pedírselo al juez. Ella se lo puede pedir al juez o el hijo se lo puede pedir al juez". Según dice, está convencido de que algún día saldrá a la luz la verdad. "Yo creo que sí", ha afirmado a Europa Press.

En cuanto a las desgarradoras confesiones de Ivonne durante esta semana, en las que ha compartido su estado anímico derivado de la mala gestión económica de sus ingresos a lo largo de estos años, Navarro ha contestado muy tajante: "Eso ya me da igual, me da exactamente igual... Es todo mentira, ella misma es una mentira y, bueno, pues, son las consecuencias de vivir en la mentira permanentemente durante toda tu vida".

La modelo contó que en este momento no tiene nada. "Cuando trabajaba en la tele tenía unos ingresos muy altos y ya no tengo nada. No sé si se llama mano negra, pero me parece raro que nadie me llame". Lejos de la compasión, Navarro ha añadido que la mentira no favorece a nadie. "La cabeza, pues, no mantiene un equilibrio, no mantiene una serenidad porque vives en una mentira. Tú sabes, cuando te enfrentas al espejo cada mañana, que estás viviendo en una mentira y eso perjudica". El presentador ni siquiera cree que vaya al psiquiatra. "Si así fuese, lo primero que le diría es: ¡Oye, soluciona esto!". Su sospecha es que todo lo que hace "son cosas para vender".

Quince años de dolor

El presentador de televisión ha recordado el sufrimiento que lleva aguantando él y su familia durante más de quince años: "El daño está hecho, el daño que me ha hecho esta mujer a lo largo de los últimos 15 años es muy considerable a nivel personal, a nivel familiar, a nivel profesional y a nivel social". Ha negado, por último, que Alejandro Reyes rechazase su pensión: "Eso es mentira, completa mentira", ya que "él renegó cuando nosotros presentamos la demanda para decir que ya se buscaba la vida y demás, él no se quiso presentar al juicio. Entonces dijo eso y ahora, como siempre, se venden las cosas de la forma más estúpida posible, mintiendo siempre sobre bases de mentiras".

Su conclusión es que "esta señora es mentira toda ella". Y le duele por el impacto que la mentira ha tenido en su familia y en él. "El daño está hecho y es irrecuperable. Son quince años de machaque y de persecución, son muchos años".