Cargando...

Jet set

Sofía Palazuelo: dos bodas con pedigrí y un parto inminente

Cayetano, su tío político, se casa el día 4 de octubre y su hermano, el 11, en Cáceres

Sofía Palazuelo, primeras palabras tras anunciar su tercer embarazo: "Un niño nos hace mucha ilusión" EUROPAPRESS

La elegante duquesa de Huéscar, esposa de Fernando Fitz-James Stuart, heredero de la Casa de Alba, afronta un final de 2025 marcado por los grandes acontecimientos familiares… y todos parecen concentrarse en apenas unas semanas. A sus 34 años, Sofía, siempre discreta pero impecable en cada aparición pública, se prepara para recibir a su tercer hijo (está de ocho meses). Tras las pequeñas Rosario y Sofía, este nuevo bebé será un varón y llevará el nombre de Fernando, como su padre y su abuelo. El embarazo, avanzado ya en su recta final, coincide con un calendario social que no deja respiro. ¿Podrá asistir a estos enlaces?

El primero será el 4 de octubre, en Sevilla, donde su tío político Cayetano Martínez de Irujo, Duque de Arjona, contraerá matrimonio con Bárbara Mirjan tras casi una década de relación. La ceremonia se celebrará en la iglesia de los Gitanos, un templo con fuerte vínculo sentimental para la familia, pues allí reposan las cenizas de la duquesa de Alba y que ella misma contribuyó a restaurar. Tras la misa, los invitados se trasladarán a la finca Las Arroyuelas, donde Cayetano recibirá a sus amigos y familiares en un entorno que mezcla historia y tradición. Para Sofía será también un momento simbólico: la unión oficial de un miembro clave de la familia con quien ha compartido incontables celebraciones.

Cayetano Martínez de Irujo y Bárbara MirjanGtres

Apenas una semana más tarde, el 11 de octubre, la duquesa se desplazará a Cáceres para asistir a la boda de su hermano mayor, Fernando Palazuelo, con la actriz peruana Micaela Belmont, hija de una exministra de su país. Su hermano fue su padrino en la boda de Sofía y el escenario elegido, el Palacio de Godoy, es un proyecto personal de Fernando. Este edificio renacentista del siglo XVI ha sido rehabilitado por él como hotel boutique tras una inversión de 14 millones de euros, y la boda servirá como presentación en sociedad del lugar.

En medio de estos compromisos, Sofía mantiene su habitual discreción pública, evitando declaraciones y centrando su vida en sus hijos, su marido y las responsabilidades que conlleva su título. Y aunque este otoño se vista de bodas y nuevos comienzos, en el horizonte sigue presente la compleja herencia personal que arrastra: el eco de las investigaciones fiscales que en su día afectaron a su padre, el empresario Felipe Palazuelo, afincado en Perú, y los ajustes tributarios que vivió su madre, Sofía Barroso, figuran como un recordatorio de que incluso en las sagas más distinguidas, la vida combina luces y sombras. Sofía ha aprendido a convivir con ello, sin comentarlo nunca, eligiendo que su historia la definan los momentos de unión y no las viejas polémicas.