Receta
Guía infalible para cocer arroz sin que se pase o se pegue
Cómo conseguir un arroz suelto y sabroso en siete sencillos pasos
Se podría decir que hay tantas formas de preparar el arroz como personalidades. Que en cada casa se cocina el arroz de distinta manera. Y que, además, el arroz es una religión, por lo que uno debe andarse con cuidado. El arroz un plato tan importante como sencillo de preparar. Y a todo el mundo gusta. Pero siempre, cuando uno se propone preparar arroz, surgen las mismas preguntas, las mismas dudas: ¿me quedará pegado el arroz? ¿se me pasará el arroz?
La receta de a continuación no es académica. Pero es la guía infalible y definitiva para cocer el arroz sin que se pase o se pegue. Para ello cogeremos como ejemplo el arroz bomba, que es el más típico y se puede encontrar en cualquier supermercado y a buen precio. Para cocer el arroz sin que se pase o se pegue no se necesitan más que seis ingredientes y tres utensilios.
Ingredientes para cocer el arroz sin que se pase o se pegue
- Arroz
- Aceite de oliva
- Agua
- Un diente de ajo (opcional)
- Dos hojas de laurel (opcional)
- Sal
- Pimienta
Utensilios para cocer el arroz sin que se pase o se pegue
- Olla (con su tapa)
- Cuchara o espátula
- Taza de café solo
Primer paso
El primer paso para cocer el arroz sin que se pase o se pegue es echar un chorrillo generoso de aceite de oliva en la olla. Coger un diente de ajo (o dos, si gusta mucho el ajo) sin pelar, aplastarlo para que se rompa y tirarlo en la olla. Para dar más sabor, añadir una o dos hojas de laurel.
Segundo paso
Dorar un poco el ajo junto con las hojas de laurel a fuego lento o medio. Si se decide no cocinar con ajo u hojas de laurel, obviar este punto.
Tercer paso
Aquí el gran dilema de las cantidades. Para ello, se deben calcular las personas para las que se quiere preparar el arroz. Lo mejor para calcularlo es una taza de café por persona, por ración. ¿Que será un arroz para dos? Pues se lanzan dos tazas de café llenas de arroz a la sartén. ¿Cinco personas? Pues lo mismo, pero cinco veces. Mezclarlo todo bien sin parar de remover durante dos minutos. Es importante no dejar de remover para que no se queme el arroz. A fuego lento o medio, aún.
Por cierto, este es el momento de salpimentar al gusto.
Cuarto paso
Verter en la olla el doble de tazas llenas de agua que las de arroz. Es decir, si es para dos personas, pues cuatro. Y si es para cinco, pues diez.
Pero aquí hay un truco importante: a veces es mejor el doble menos uno que el doble exacto. Recomendación: si se vuelcan dos tazas de arroz, mejor verter tres tazas de agua; si se vuelcan cinco tazas de arroz, mejor verter nueve. Siempre es mejor que el arroz quede crudo a que se pase. Porque siempre se está a tiempo de añadir una tacita de agua más. Pero una vez el arroz se ha pasado, ya no hay vuelta atrás.
Quinto paso
A la que se vierte el agua, se debe subir el fuego al máximo. Y aquí, en este punto, en esta transición, está la clave para que el arroz no se pegue. Hay que pegarle un buen meneo al arroz con el agua. Ya sea con la espátula o directamente agarrando la olla y con un buen movimiento de muñeca.
E importante: a partir de este momento ya no se debe volver a tocar el arroz. Lo que activa el almidón -que provoca que el arroz esté más pegado y esponjoso- es el movimiento. Por lo tanto, si no se quiere el arroz pegado la clave es tocarlo lo mínimo. El agua y el fuego ya harán su trabajo.
Para este punto ya se debe haber tapado la olla, aunque no del todo. Es bueno que la olla respire un poco.
Sexto paso
En cuanto el agua esté en plena ebullición hay que bajar el fuego. De la burbuja portentosa se debe pasar a una burbuja más tranquila, suave, templada. Que hierva, pero sin pasarse. Es como encontrar el punto de embrague cuando se empieza a conducir.
Así, con la tapa puesta pero no del todo, se deja cocer unos quince minutos.
Séptimo paso
Comprobar que el arroz esté en el punto. Si lo está, apagar el fuego. Y, una vez apagado el fuego, dejar reposar cinco minutos con la tapa bien puesta, cubriéndolo todo.
Claves y conclusiones
- De esta guía se pueden sacar varias conclusiones o claves que uno debe llevarse a la tumba.
- Más el arroz crudo que pasado. Porque lo primero tiene solución mientras que lo segundo, no.
- Si no se quiere que se pegue, más vale mover el arroz lo mínimo posible. Cuanto más se mueve, más pegado. Se debe mezclar bien el arroz, el agua y el aceite con un buen movimiento al principio y después dejarlo estar.
- Dejar respirar la olla mientras hierve el agua. Mientras el agua bulle se debe tapar la olla, pero no del todo.
- Que el agua no hierva a todo fuego. Encontrar el equilibrio. La templanza en las burbujas.
- Dejar reposar cinco minutos con la tapa bien puesta.
Esta es la guía o la receta infalible si se quiere un arroz suelto, al punto y sabroso en siete sencillos pasos. Cocer el arroz sin que se pase o se pegue no debería suponer ningún problema.
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