Copa del Rey

Barcelona

El Barcelona encarga el título

El Camp Nou comenzó el partido de ayer guardando un emotivo minuto de silencio por la muerte de Severiano Ballestero, un «culé» ilustre. Una foto del cántabro junto a su amada Ryder Cup presidió el marcador. La sonrisa que mostraba Seve, esa sonrisa eterna, era premonitoria.

spain
spainlarazon

Allí donde esté, el mejor golfista español de todos los tiempos seguro que celebró como el que más el triunfo que logró su Barça ante el Espanyol. Una victoria que deja al equipo de Guardiola a un solo punto de conseguir su tercera liga consecutiva, algo que sólo ha ocurrido una vez en toda la historia del club azulgrana. Fue hace casi treinta años, con el de Santpedor en el campo y Johan Cruyff a los mandos del «Dream Team».

El técnico azulgrana tiene muy claro desde hace semanas que para ser campeón, su equipo es el que debe sumar los puntos y no esperar a que falle el rival. «El único que de momento ha ganado algo es el Madrid», alertaba la víspera. Fiel a su discurso. Guardiola no reservó a nadie ante la visita de un Espanyol al que en las últimas temporadas no se le da nada mal el coliseo azulgrana. La única excepción fue Puyol, que se quedó en la grada y cada vez queda más claro que se le reservará con vistas a Wembley.

Pochettino es uno de los entrenadores que mejor ha sabido contrarrestar el juego azulgrana en los últimos tiempos. Durante media hora, ayer pareció volver a lograrlo. El Espanyol planteó un partido destructivo. Sólo Osvaldo tenía libertad para campar a sus anchas. Por cierto, bien harán los blanquiazules en no venderle, porque el italoargentino es uno de esos jugadores sobre los que se puede construir un equipo como el Espanyol. Cerca del área, tiene un peligro increíble.

Los jugadores blanquiazules presionaban al Barça al cruzar la línea de medio campo y su tela de araña apenas dejaba espacios para la creación azulgrana. Los «pericos» no rehuían el contacto y tenían órdenes de hacer falta a la mínima. El partido quedaba a merced de un error visitante o de una inspiración local, que fue lo que sucedió. Iniesta regateó a los defensas y batió a un inspirado Kameni. El Espanyol no encontró respuesta ni viéndose por debajo en el marcador.

En el segundo tiempo, los blanquiazules bajaron su intensidad y el Barça jugó mucho más cómodo. Un córner cabeceado a gol por Piqué certificó el triunfo barcelonista poco después del descanso. El Camp Nou respondió con gritos de «¡Campeones, campeones!». El Barça ya ha encargado la liga.

Alirón azulgrana mañana o pasado
Después de los resultados de la última jornada, el Barcelona dispone de dos vías para proclamarse campeón por tercera temporada consecutiva. La primera oportunidad llegará mañana, en el derbi madrileño. Si el Getafe logra puntuar en el Santiago Bernabéu, en un choque que empezará a las diez de la noche, el Barça será campeón. En caso de triunfo blanco, los azulgrana se proclamarían campeones el miércoles sacando un punto del Ciutat de València. Sería el mismo escenario que cuando Rijkaard ganó su primera Liga.

Ficha técnica:

2 - Barcelona: Valdés; Alves, Mascherano, Piqué, Fontàs (Abidal, m. 71); Busquets, Xavi (Keita, m.89), Iniesta; Pedro (Afellay, m.84), Messi y Villa.

0 - RCD Espanyol: Kameni; Galán, Raúl Rodríguez, Amat, Chica; Javi Márquez, Javi López (Isaías, m. 77); Joan Verdú, Iván Alonso (Luis García, m.46), Callejón (Álvaro Vázquez, m.59) y Osvaldo.

Goles: 1-0, m.29: Iniesta. 2-0, m.47: Piqué.

Árbitro: Fernández Borbalán (col. Andalucía). Mostró cartulina amarilla a Luis Garcia (m.62), Pedro (m.62), Kameni (m.62) y a Isaías (m.84).

Incidencias: Asistieron al encuentro 89.994 espectadores en partido correspondiente a la trigésimo quinta jornada de Primera División, disputado en el Camp Nou. Antes del inicio, los aficionados homenajearon al equipo de fútbol sala, flamante campeón de la Copa del Rey, y al juvenil, campeón de la Copa de Campeones. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Severiano Ballesteros, fallecido la madrugada del pasado sábado.