Castilla y León

Los Ayuntamientos advierten de que sin créditos sólo harán frente al gasto corriente

La Razón
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Finalmente, el Gobierno de España restringirá el crédito a los ayuntamientos como mínimo hasta el 2012, para tratar de reducir el déficit del país. Tras conocerse la noticia, la gran mayoría de los alcaldes y alcaldesas de la Comunidad han levantado su voz para para denunciar lo que consideran un abuso y una medida indecente, y para advertir de que con la eliminación de los créditos, los ayuntamientos de la Región sólo podrán hacer frente al gasto corriente. Es el caso de la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, muy crítica, y que considera esta situación «injusta» y «una puñalada trapera, porque ataca a los más débiles». De la misma forma se expresaba el portavoz del Ayuntamiento de Salamanca, Fernando Rodríguez, quien aseguraba que esta medida perjudicará a los ayuntamientos que han hecho sus deberes y menos han contribuido al déficit y alertaba de que este decreto supondrá también la «paralización» de las inversiones municipales previstas, debido a que la mayoría de los proyectos se costean a través de los créditos.Por su parte, el alcalde de Segovia, el socialista Pedro Arahuetes, mostraba también su desacuerdo por esta actuación que calificaba como un «acto de irresponsabilidad».En su opinión, se trata de «la más grave y peor medida que se ha tomado en los treinta años de historia de la Democracia en España». «No podremos realizar inversiones y afectará al empleo y al bienestar social de nuestros vecinos», advertía un decepcionado Arahuetes, tras insistir en que la gestión municipal se va a reducir únicamente a pagar las nóminas, el agua y la luz cada mes. «Es necesario reducir el déficit existente y que nos apretemos todos el cinturón. Pero tampoco tanto como para que no podamos ni siquiera respirar», denunciaba el alcalde de Segovia.Finalmente, desde Palencia, el también alcalde socialista Heliodoro Gallego, más cauto, dijo que la medida exigirá un mayor control del gasto, y advirtió de que los ayuntamientos más endeudados «lo van a pasar muy mal».