Castilla y León

Juventud divino tesoro

La Razón
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Nació en Saldaña en 1951, lo que le convierte en un político veterano. Aunque retirado, Jesús Quijano sigue siendo un ejemplo para sus colegas. Estuvo al frente del PSOE de Castilla y León diez años y dos décadas como procurador en las Cortes. Ahora observa desde la distancia lo que pasa a su alrededor y tuerce el gesto. La clase política está por los suelos. La imagen que dan ante los ciudadanos se ha deteriorado por la corrupción y por la nefasta situación económica. Pero dejar huella te hace inolvidable y Quijano se ha ganado el respeto en las bancadas del hemiciclo.
La edad es un lujo al que no todo el mundo puede acceder. Un hombre que cumple años es cada día más sabio. Gana experiencia y se convierte en referente. En culturas como la asiática los ancianos son venerados.
Ellos tienen la última palabra. Se les escucha con atención porque han puesto las piedras del puente que cruzamos con insolencia. También en el Senado romano eran los mayores los que tomaban las decisiones más importantes.
Quizá un error de occidente haya sido arrinconar a los que se mueven más despacio, a los que han perdido el oído o a los que tienen el pelo blanco. Hemos llegado a una situación límite. Es muy fácil echar la culpa a los jóvenes, sería casi demagógico, pero no nos faltaría un ápice de razón. Los tiburones no se paran a escuchar. Simplemente especulan. Buscan el dinero fácil e inmediato. Construyen sin cimientos. Los políticos de raza desaparecen y a los que viven en la sombra se les mira con recelo.