Ecuador

Ponce a las puertas del indulto corta un rabo en Quito

La Razón
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Enrique Ponce fue esta tarde el máximo triunfador en el día del doctorado de Curro Rodríguez en la segunda de la feria de Quito. El valenciano le cortó todos los trofeos al primero de su lote demostrando su veteranía y su técnica ante un animal encastado que no se lo puso nada fácil. El ejemplar de Triana se vino arriba tras el tercio de banderillas y con genio acudió a la muleta del de Chiva. Poco a poco, Ponce le bajó la mano y consiguió que el astado sacase la bravura que llevaba dentro y dejase de arremeter con genio. Una labor que fue de menos a más. Con los tendidos pidiendo el indulto, el presidente ordenó que se le diese muerte. Lo pasaportó de estocada perfecta.

 

Con el cuarto, con las fuerzas justas, lo condujo con suavidad para sacarle el poco contenido que tenía. El viento molestó bastante y deslució la actuación. En esta ocasión no anduvo tan acertado con los aceros, lo que le impidió sumar otro trofeo más al esportón.

 

Curro Rodríguez se las vio con el mejor ejemplar de la tarde. El animal, de nombre "Cochambroso", no hizo honor a su nombre y fue noble con clase en su embestida. El toricantano puso ganas y disposición ante un toro que pedía que le bajasen la mano, y en cuanto lo hizo, la faena cogió vuelo por el pitón derecho.

 

Pero en el momento de cambiar a la mano izquierda, un mal paso del toro le provocó la fractura de la mano derecha. Rodríguez lo intentó, pero el animal se quedó sin manos, dejando una imagen dantesca. Tuvo que descabellarlo tras intentar matarlo y pinchar en dos ocasiones. Ante el que cerraba plaza, el molesto aire que corría y la falta de clase del burel, que punteaba y cortaba el viaje, diluyeron las ganas del ecuatoriano, que mató de estocada atravesada.

 

Morante de la Puebla fue el damnificado de la tarde. Se las vio ante un lote descastado y con mucho peligro. Con el tercero optó por abreviar, porque carecía de clase y fuerza. Con el quinto quiso justificar su presencia en Quito. Tragó mucho de un morlaco al que sólo pudo sacarle algunos naturales sueltos. En la suerte suprema tampoco estuvo muy acertado.

 

En Quito (Ecuador). Segundo festejo de la Feria de Jesús del Gran Poder. Toros de Huagrahuasi y Triana, de discreta presentación y juego desigual, noble el 1º y encastado el 2º, que fue premiado con vuelta al ruedo. Enrique Ponce, dos orejas y rabo y ovación; Morante de la Puebla, silencio y silencio tras aviso; y Curro Rodríguez, palmas y silencio tras aviso. Tres cuartos de entrada.