Va por todos

No se ha llegado hasta aquí por casualidad. Desde que Pepe Santamaría crease la estructura del fútbol base de la Federación en 1982, todo ha evolucionado. Los seleccionadores, desde Miguel Muñoz, sembraron hasta que se recogió el premio de la Eurocopa. Y miles de educadores y entrenadores anónimos en infantiles, cadetes y juveniles han contribuido con la mejora de su formación y aprendizaje a perfeccionar la base de nuestro balompié. El mérito es de todos. De los clubes, que han potenciado sus canteras y for- mado técnicos de primer nivel para fabricar excelentes futbolistas; de otra parte, la Real Federación Española de Fútbol, que ha dotado de estructuras y medios para el seguimiento de jóvenes desde las edades más tempranas.
Cuando aparecen Iker, Xavi, Iniesta, Torres y los demás hay un seleccionador observando. No juegan en el primer equipo, pero ya son internacionales. Ahí se conocen y surge la amistad, el compañerismo y la solidaridad. Cuando han triunfado siguen formando una piña. Hay miles de personas responsables de nuestra «Roja» de hoy. En cada aldea, en cada pueblo o ciudad, maestros, profesores, entrenadores y padres se han preocupado de la formación de los chicos. Los poderes públicos han subvencionado, los clubes han invertido y la Federación ha financiado todo el fútbol territorial.
No sé si ganaremos esta noche, espero que sí, pero conviene re- flexionar acerca del trabajo realizado durante muchos años por millones de personas. Si ganamos, será la victoria de todos. Que Dios nos acompañe. Que la calle sea nuestra.