El PSOE se pregunta qué ha cambiado para que la región asuma ahora el déficit

Valladolid- Malestar en el PSOE por el respaldo de la Junta y el PP de Castilla y León a las reformas emprendidas por el Gobierno contra el déficit y por que nuestra Comunidad haya asumido en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera de este pasado martes alcanzar el objetivo de déficit del 0,7 por ciento en 2013, cuando hace un par de semanas, en la anterior reunión de consejeros de Hacienda, se abstenía sobre este asunto.

El secretario general del Grupo Socialista en las Cortes, José Francisco Martín, realizaba ayer unas duras declaraciones contra el Gobierno regional por este cambio de postura y pedía a la consejera Pilar del Olmo, que explique los motivos del porqué este paso hacia atrás y qué es lo que ha movido a la Junta a cambiar de parecer. Aunque martín tiene su propia versión de los hechos: «Lo único que nos consta -dice- es que a Herrera le leyeron la cartilla en Génova durante la reunión de barones del PP y le han obligado a tomar esta decisión, con la que antepone los intereses del partido a los de los castellanos y leoneses». Algo que para el procurador socialista «es una postura indigna y vergonzante en política».

De la misma forma, desde el sindicato UGT en Castilla y León también consideran que la consejera Pilar del Olmo debería de haberse rebelado contra estos objetivos porque «conllevarán un recorte de alrededor de doscientos millones de euros que obligarán al Gobierno regional a llevar a cabo nuevos recortes de gasto así como aumentar los impuestos».
Sin embargo, desde el PP, su portavoz en el Parlamento autonómico, Carlos Fernández Carriedo, respondía a estas acusaciones defendiendo la actitud de la Junta de respaldo al Gobierno para poder sacar a España de la crisis en la que se encuentra, y contratacaba acusando a los socialistas de ponerse del lado de los nacionalistas radicales en lugar de arrimar el hombro con el Gobierno para hacer frente a esta delicada situación económica y financiera por la que atraviesa el país. «¿Qué le ha pasado al PSOE ahora para que se sume a una posición de dos nacionalismos radicales como Cataluña, que plantó a la reunión, o de Andalucía que se marchó durante la misma?», se preguntaba Fernández Carriedo, tras asegurar que Castilla y león sigue pensando lo mismo y que cumplirá con el objetivo de estabilidad previsto.