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BM Atlético de Madrid

Alarma culé por Julián García Candau

La Razón
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La derrota del Barcelona en Glasgow no es hecho circunstancial, producto de error momentáneo en noche de infortunio. El equipo comenzó a dar síntomas de empecinamiento con Guardiola. Con Tito Vilanova los problemas se han agrandado por diversas circunstancias.
La primera, tal vez, ha sido el cúmulo de lesiones que le han impedido formar una defensa convincente. Ante el Celtic reapareció Piqué, pero era tarde. Las ausencias de éste, Puyol y Abidal, junto a la de Alves, que también ha pasado por clara baja forma, han convertido al equipo en más vulnerable que en campañas anteriores. Vilanova ha tenido que improvisar cuartetos defensivos de los que también ha tenido que desaparecer Adriano por lesión.
La debilidad defensiva, que denuncian los goles encajados, ha corrido pareja con la disminución del carácter goleador. El ataque se ha hecho previsible y existe demasiada preocupación por buscar a Messi.
Otro problema no resuelto es el de la alineación de Alexis. Parece que hay deseos de justificar su caro traspaso, de momento no justificado. Con ello se ningunea a Villa, hombre resolutivo y goleador. Contra el Celtic tardó demasiado en salir, lo hizo cargado de ansiedad y obsesionado por el gol. El Camp Nou le quiere.
Posdata. Tito debe resolver el conflicto Messi-Villa. Acabará pagando el asturiano.