F-1

Valencia

Fin de semana para olvidar

El Gran Premio de Malasia de 2011 no pasará a la historia por sus hitos o resultados deportivos sino por las fatalidades del deporte y de los deportistas, puesto que sobre el asfalto de Sepang se dejó la vida un joven de apenas 24 años, el italiano Marco Simoncelli.

La fatalidad hizo que "Súper Sic"se cayese en la segunda vuelta y el estadounidense Colin Edwards no lo pudiese evitar. El impacto fue tan brutal que el piloto italiano prácticamente se quedó sin vida en el acto.

Ningún intento por reanimarlo surtió efecto y por primera vez en en mucho tiempo la carrera de MotoGP se tuvo que anular.

Desafortunadamente, antes del luctuoso fallecimiento de Marco Simoncelli en Sepang se disputaron dos carreras más y por uno u otro motivo tampoco estuvieron exentas de sus propios incidentes.

El menos relevante de todos ellos fue que el español Nicolás Terol no pudo hacerse con el título mundial del octavo de litro. Le bastaba con acabar por delante del francés Johan Zarco, pero quería proclamarse campeón del mundo a lo grande, ganando, y lo intentó hasta el final.

Tal fue el esfuerzo que realizó Terol, físico y mental, por la presión de saber que se jugaba el título mundial, que como él mismo explicó un poco después le dio una "pájara".

Aún con todo, Terol cuenta con veinte puntos de ventaja y lo normal es que el mismo circuito en el que nació como piloto, el de la Comunidad Valenciana, le vea en breve proclamarse campeón del mundo.

Más suerte tuvo, dentro de todo lo que le pasó a lo largo del fin de semana, Marc Márquez, quien llegaba con ganas de hacer desaparecer las diferencias con el alemán Stefan Bradl en su lucha por el mundial y a las primeras de cambio prácticamente quedó descartado de esa pelea por una inexplicable caída.

A Bradl le hacía falta ganar, y una bandera roja y Thomas Luthi se cruzaron en su camino.
Como el mismo Márquez dijo cuando anunció su baja de la carrera de Moto2 en Sepang, "hasta que no se baja la bandera de cuadros todavía estamos vivos"; en un fin de semana como el de Sepang es necesario aclarar que se refería estrictamente al aspecto deportivo.

Y en ese aspecto, acertó, puesto que la segunda plaza de Bradl le colocó al alemán con 23 puntos de ventaja, una cábala muy complicada para Marc Márquez, que saldrá en Valencia a ganar, pero también necesitará que su rival no acabe entre los trece primeros, complicado, muy complicado, pero como él mismo dijo "hasta que no se baja la bandera de cuadros...".