Castilla y León

La escopeta regional por Pedro Damián de Diego

La Razón
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Estamos saliendo del otoño, época muy propicia para ir de caza y eso que a punto hemos estado de quedarnos en casa, compuestos y con la escopeta engrasada, a costa del despiste de la Junta de no incluir la normativa europea sobre aves migratorias en el decreto que regula la temporada cinegética en Castilla y León.

Berlanga hizo en 1977 una película, tan buena y divertida como esperpéntica, en la que un industrial catalán aprovecha una cacería para comer el tarro al Gobierno sobre las bondades de los porteros automáticos, con el fin de obtener del poder la obligatoriedad de su instalación en todos los edificios residenciales.

Divertido sería también, treinta y cuatro años después, aprovechar ese escenario cinegético para aplicarlo a los temas de actualidad: ministrables abatiendo perdices para llamar la atención del inminente presidente Mariano Rajoy; presidentes autonómicos tratando de cosechar puntos para colocar notables de su tierra en el Consejo de Ministros...

Pero me da la impresión de las pocas ambiciones cinegéticas de Mariano Rajoy ya quedaron colmadas en 2009 con la cacería en la que abatió a su tocayo Rodríguez Bermejo y al juez Garzón.
Los elegidos el Gobierno seguro que no van a representar más cuotas de poder que su competencia profesional. Y si existiese una Escopeta regional, apuesto a no conseguiría más carteras para Castilla y León que la de la más que probable vicepresidenta y portavoz del Gobierno Soraya Sáez de Santamaría.

La solución, el próximo 22 de diciembre junto con el sorteo de la Lotería de Navidad.