Banco Santander

El Santander da ejemplo de cómo defender el interés de sus clientes

La Razón
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El Banco Santander anunció ayer que compensará a los clientes afectados por el fraude de Bernard L. Madoff con el 100% de su inversión inicial. La entidad que preside Emilio Botín prevé llevar a cabo dicha compensación a través de participaciones preferentes. Con esta valerosa decisión, el banco español se convierte en el primero del mundo que, lejos de refugiarse en los fondos públicos, hace frente con sus propios medios y su acreditada solvencia a las consecuencias que el gigantesco fraude de Madoff ha tenido sobre sus clientes. Hay muy pocas entidades financieras en el mundo con el músculo y la eficiencia necesarios para hacer frente a retos de esta dimensión. Sólo aquellos que tienen sus balances saneados, que no han incurrido en heterodoxas prácticas alejadas de la prudencia bancaria y que se han mantenido fieles a sus trayectorias pueden tomar decisiones como la que ayer tomó el Santander. Nadie está a salvo de fiascos y de estafadores como Madoff, por eso lo importante es que existan bancos con la fortaleza necesaria para que sus clientes no se sientan abandonados. Al margen de que los bancos no tengan estricta obligación de enjugar inversiones fallidas en las que actúan como meros intermediarios, lo cierto es que sólo está al alcance de muy pocos ir más allá de sus obligaciones, como el Santander.