Japón

La última fábrica de Honda reducirá un 40% las emisiones de CO2 en la producción de cada motor

Fachada de la nueva fábrica de Honda en Ogawa (Japón)
Fachada de la nueva fábrica de Honda en Ogawa (Japón)larazon

Honda acaba de completar la finalización de una nueva planta que producirá cilindros y piezas fundidas para los motores diésel desarrollados en los modelos europeos. El complejo industrial, localizado en Ogawa (Japón), iniciará su producción en otoño de este año, tras las correspondientes pruebas. Pero no se trata de una fábrica cualquiera, ya que las instalaciones de la nueva planta de Ogawa son «amigables» con el entorno. De hecho, la instalación ha sido diseñada para disminuir la cantidad de CO2 generada en la producción de cada motor hasta un 40 por ciento y un 25 por ciento en la fase de producción. El complejo sólo tiene una línea de producción, pero ésta puede producir ocho tipos diferentes de motores, incluido el de bajas emisiones.La planta, de 195.000 metros cuadrados y capacidad para producir un máximo de 200.000 unidades al año, generará 500 nuevos empleos en la región japonesa de Saitama. Actualmente, Honda produce motores diésel en la fábrica de Suzuka, en Japón, proceso que se irá transfiriendo, gradualmente, a la planta de Ogawa. La nueva instalación será la encargada de producir parte de los motores diésel que ya se fabrican en Sayama con el objetivo de adaptarse al mercado europeo. El i-DTEC, modelo desarrollado en la nueva fábrica, es un motor diésel de Honda que mejora el rendimiento, la economía de combustible y la eficiencia de emisión. Se trata de un motor de aluminio, montado transversalmente, con cuatro cilindros, cuatro válvulas por cilindro, un turbocompresor variable de la boquilla y un segundo eje balanceador que permite reducir el ruido y las vibraciones.