Crisis económica

Los social zapateristas

La Razón
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stoy en condiciones de desmentir el rumor que anunciaba la inminente creación por parte de altos cargos del PSOE de la Asociación de Damnificados por Pedro Solbes (ADPE). De momento no se ha contemplado esta posibilidad, aunque, tal y como están las cosas, no se descarta que los más «echaos p'alante» den un paso al frente y se pongan manos a la obra, aun a riesgo de desatar las iras de su lider carismático y actual Presidente del Gobierno. Y es que los social zapateristas han recibido como una patada en salva sea la parte el anuncio de que Solbes seguirá en el Gobierno. «Entonces, ¿cuándo nos va a tocar a nosotros?», imploraba uno de los miembros de esta corriente, que se presumía la más fuerte dentro del PSOE, ya que está encabezada evidentemente por Zapatero. Sus seguidores no entienden cómo su lider, impulsor de la Alianza de Civilizaciones, teoría que ahora ha dejado aparcada para volcarse en la ecología planetaria, ha vuelto a contar con Solbes para ocupar el puesto de vicepresidente económico, suponiendo que ganen las elecciones. «Pero si pertenece al pasado y representa al felipismo. Además, ellos ya tuvieron su oportunidad». Y vuelta la burra al trigo y a insistir en que «ahora nos toca a nosotros». Esta última frase la repiten por doquier los miembros del ala social zapaterista. Su desconsuelo y su descontento no tiene límites. «Pero, si encima se ha autodefinido como socialdemócrata liberal, cuando aquí lo que hay que ser es social zapaterista. Así no vamos a ningún lado». Pero PZ lo debe tener muy claro cuando se ha preocupado tanto de contar con Solbes. ¿Será por lo del empate técnico que dan las encuestas y sondeos? Por cierto, llama poderosamente la atención que los social zapateristas hayan coincidido con el PP en criticar la continuidad del actual vice. «Y encima quiere más poder, controlar el capítulo económico del programa electoral, que no se dispare el gasto social, mantener el superávit público y a todo su equipo». Entonces, «qué va a quedar para nosotros». Respuesta desde las alturas: «Tranquilos, lo primero es ganar las elecciones, luego ya veremos».