«Pinza» bolivariana contra Uribe

CALi- Una turbulencia diplomática se formó después de que el Ejército colombiano abatiera el sábado en territorio ecuatoriano al jefe guerrillero de la narcoguerrilla de las FARC, Raúl Reyes.

Ante esta situación, horas después de que el presidente Hugo Chávez anunciase la retirada de su embajador en Colombia, el Gobierno de Ecuador decidió actuar de la misma forma y anunció que ellos también retirarán «de inmediato» a su embajador en Bogotá por «transgredir» su soberanía nacional. «Ecuador ha resuelto retirar, de inmediato, a su embajador en Bogotá frente a los graves hechos ocurridos en la zona fronteriza, que constituyen una trasgresión a los principios de soberanía e integridad territorial amparados por el derecho internacional», precisa el Ministerio de Exteriores en un comunicado. En dicho comunicado se agrega que el Ministerio convocó ayer al embajador de Colombia en Quito, Carlos Holguín, para comunicarle la retirada de su representante diplomático en Bogotá, Francisco Suéscum, quien regresará inmediatamente a Ecuador.

El mandatario ecuatoriano Rafael Correa ya había anunciado que elevaría una nota de protesta al Gobierno del vecino país, reclamando por esos sucesos. «Hemos esperado a que nuestras tropas lleguen hasta el lugar de los sucesos, para verificar "in situ"lo que realmente había ocurrido y con estupor hemos descubierto que de lo que se trataba era un campamento temporal de la guerrilla a dos kilómetros de la frontera con Colombia, dentro de nuestro territorio, que fueron masacrados mientras dormían, que claramente se invadió el espacio aéreo ecuatoriano, que seguramente fueron localizados con ayuda de tecnología de punta de potencias extranjeras y extra regionales y no sólo eso, que entraron a llevarse el cadáver de Raúl Reyes y dejaron 15 cadáveres más en la zona, que nuestras fuerzas armadas han encontrado, así como dos guerrilleras heridas», expresó indignado Correa.

El gobernante manifestó que el presidente Álvaro Uribe «mintió» al explicarle la situación y consideró que tal vez el mandatario estuvo «mal informado por sus comandantes». Añadió que está dispuesto a enfrentar hasta las últimas consecuencias y que «se acabaron los ultrajes y abusos del Gobierno colombiano».

A su vez, los ministerios de Relaciones Exteriores y Defensa de Colombia dijeron que responderían a la nota de protesta y ratificaron que su país «no violó soberanía sino que actuó de acuerdo con el principio de legitima defensa». «Los terroristas, entre ellos Raúl Reyes, han tenido la costumbre de asesinar en Colombia e invadir el territorio de los países vecinos para refugiarse. Muchas veces Colombia ha padecido estas situaciones que estamos obligados a evitar en defensa de nuestros ciudadanos», se precisó en un comunicado.

A su vez, las FARC señalaron que la muerte de Raúl Reyes no afectará a la búsqueda de un Acuerdo Humanitario.