Nueva Zelanda

Por qué la chapuza

La Razón
La RazónLa Razón

Seguimos sin saber por qué no se eligió al Real Club Náutico de Valencia como «primer desafiante» del Alinghi tras la Copa América de 2007. El presidente de la Generalitat, su homólogo de Iberdrola, Sánchez Galán, o la alcaldesa Rita Barberá deberían explicar por qué se optó por esa entelequia del Club Náutico Español en lugar de aplicar la racionalidad. Sorprende que el RCNV, club del mayor prestigio entre sus iguales, no fuera designado como «challenge of de record». No sólo era lo normal porque Valencia iba ser la sede de la competición, sino que había sido, junto con el Náutico de Bayona, el desafiante en las Copas América de San Diego y de Nueva Zelanda. Sin embargo, ahora no servía para la que iba a desarrollarse en Valencia. Cada vez que llega una noticia sobre el contencioso judicial entre Alinghi y Oracle, me pongo de los nervios pensando que todo estaría solucionado con la decisión lógica. Conocemos por qué se hizo a la Federación de Vela desafiante en 2007 -quedó claro en la cena que siguió a la conferencia de Manuel Casanova, presidente del RCNV, en el Club de Encuentro. Nos falta saber por qué se prefirió la chapuza con perjuicio notable para Valencia y a la Copa.