Tribunal Constitucional

Proceso justo

La Razón
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Decisiones como la adoptada ayer por el Supremo pueden sorprender a las personas no familiarizadas con el mundo jurídico. Sin embargo, hay que entender que la Justicia no está sólo para garantizar la seguridad de los ciudadanos, que se ven violentados en sus derechos fundamentales, sino también para defender los derechos de los delincuentes. ¿Qué derechos tiene un delincuente? Por ejemplo, un proceso justo. Y si se demuestra que no se han respetado las garantías y procedimientos previstos en la norma, como parece que ha ocurrido en este caso, el procesamiento puede ser retrotraído hasta el mismo momento en el cual se ha cometido la incorrección. En este caso, el Supremo considera que el delito debería ser juzgado por un jurado popular, y no por un tribunal. Es un error subsanable. Lo que sí podríamos plantearnos es hasta qué punto este error puede motivar una decisión como la adoptada. O quizá, que el Supremo debería haber subsanado este vicio procesal. Así, está el principio de economía procesal: evitar que un proceso se alargue demasiado subsanando posibles vicios que, como en este caso, no afectan al fondo de la cuestión. La decisión del Supremo no va a suponer previsiblemente un cambio sustancial en el resultado final de este proceso. Aunque resulte un tanto extraña, e incluso generadora de desconfianza en la Justicia, por parte de los ciudadanos.

*Profesor Titular de Derecho Constitucional en la UNED