Refugiados

Erdogan le declara la guerra a la UE y envía miles de migrantes a la frontera

Unas 100.000 personas han dejado el lado turco, según fuentes oficiales de Turquía

Un grupo de personas espera en la frontera turco-griega
Un grupo de personas espera en la frontera turco-griegaEmrah GurelAP

Mi hermano me llamó hace un rato para decirme que los griegos le dejaron entrar y después le quitaron todo su dinero y el móvil y le enviaron de nuevo a la frontera del lado turco”, explicó en una conversación por WhatsApp a la RAZÓN un sirio refugiado en Turquía, bajo el pseudónimo de “Estrella”, que no quiso dar su nombre por seguridad.

Hará lo que haga falta, lo intentará otra y otra vez hasta encontrar la manera”, puntualizó Estrella.

Grecia y Turquía están jugando a un juego político sucio y en medio están los refugiados”, se quejó el refugiado sirio, antes de agregar: “No culpo a las autoridades griegas o turcas, la culpa es de ACNUR”.

Sobre 100.000 migrantes ha dejado el lado turco, según fuentes oficiales de Turquía. “Un total de 117.677 migrantes han abandonado el país”, anunció ayer el ministro del Interior turco, Süleyman Soylu, sobre el número de cruces registrado desde el viernes, después de anuncio del presidente Recep Tayyip Edogan que dijo que ya no podía retenerlos.

Sin embargo, tanto la oposición turca como las autoridades griegas niegan esas cifras.

Refugiados en la frontera
Refugiados en la fronteraERDEM SAHINEFE

Según datos facilitados por el principal partido de la oposición, el socialdemócrata CHP, que gobierna en Edirne, (a apenas diez kilómetros de la frontera) “es imposible” las cifras dadas por el Ministerio de Interior y habría cruzado como mucho “unos pocos miles”.

El número oficial de migrantes que han cruzado a las costas griegas ofrecido por el Gobierno contrasta con las más de un centenar de detenciones reportadas por las autoridades griegas el domingo. El Gobierno griego informó que entre el viernes y el sábado había evitado que 9.600 personas entraran en el país por la frontera terrestre, y que un total de 139 migrantes irregulares habían sido puestos bajo custodia.

En la ciudad costera de Edirne cientos de refugiados se abalanzaban ayer para tomar un taxi compartido que les llevara a la frontera, al paso de Pazarkule.

También, autobuses, que nadie sabe quién ha fletado, fueron distribuyendo a los migrantes en pequeños grupos a lo largo de unos 25 kilómetros de frontera.

Refugiados en Edirne
Refugiados en EdirneERDEM SAHINEFE

Según la agencia EFE, la gendarmería turca animó ayer a los migrantes a subirse a autobuses e ir hacia el borde fronterizo.

Nos intentan convencer diciéndonos que nos llevarán a un punto de la frontera sin vigilancia, pero ya estuvimos ayer allí y sabemos que no es verdad: la Policía griega no deja pasar a nadie y nos lanza gas lacrimógeno”, dijo a Efe un sirio oriundo de Alepo que se identificó como Mohamed.

No nos dejan regresar. Vienen con autobuses privados y nos llevan desde este paso a otro. Y desde allí a otro. Y luego nos traen de vuelta. Juegan con nosotros, nada más”, aseguró Nasser Abu Sami, otro refugiado sirio.

Ante la avalancha de personas que intentaban cruzar la frontera, la Policía griega respondió con gases lacrimógenos y cañones de agua para disipar a la multitud, y en los disturbios un refugiado sirio, según fuentes turcas, fue alcanzado por la Policía griega.

La segunda víctima fue un niño que se habría ahogado al volcar la barca en la que intentaba llegar a la isla griega de Lesbos. Los propios tripulantes volcaron la balsa para forzar que les rescatasen.

El portavoz del Gobierno griego ha responsabilizado a Turquía de esta nueva crisis migratoria y ha puesto en marcha un plan de contención. Así, las autoridades griegas reforzarán la vigilancia de todas sus fronteras, devolverán a sus países de origen a todos aquellos que lleguen irregularmente al país y han suspendido desde ayer y hasta dentro de un mes todas las solicitudes de asilo.

Desde hace cuatro días, miles de migrantes y refugiados, muchos sirios pero también iraquíes, palestinos o somalíes, están intentando cruzar la frontera turca hacia Europa, inmediatamente después de que Turquía amenazara con que ya no es capaz de contener a los refugiados, como mediada de presión a la UE.

La ofensiva en Idlib y el apoyo a Erdogan

El nuevo pulso de Erdogan a Europa viene precedido por la negativa tanto de la UE como la OTAN de apoyar una ofensiva en Idlib, después de que el pasado jueves murieran más de 35 soldados turcos en un bombardeo de las fuerzas del régimen sirio.

Así lo expresó ayer el presidente turco tras amenazar de nuevo a Europa con enviarle “millones” de migrantes si no le apoya el caso sirio. Además, con esta medida de presión, Ankara espera presionar a la UE para que aporte más dinero a la atención de los cientos de miles de refugiados sirios que viven en Turquía.

Yo les he dicho: ‘Está hecho, se acabó. Las puertas están ahora abiertas. Ahora, ustedes van a tomar su parte de la carga’”, afirmó Erdogan, quien se reunirá este jueves con su homólogo ruso Vladimir Putin para discutir un cese al fuego en Idlib.

“Espero que allí tome las medidas necesarias como un cese el fuego y que encontremos una solución a este asunto”, anheló el mandatario turco.