Descuartizado en Irán

“Nuestro hijo no estaba casado, se burlaba de nosotros, así que nos deshicimos de él”

El padre del cineasta iraní Babak Khorramdin asegura que mató a su hijo porque no se quería casar

El director iraní Babak Khorramdin, recientemente asesinado y descuartizado
El director iraní Babak Khorramdin, recientemente asesinado y descuartizadoLa Razón

Nada más atroz que unos padres que asesinan a su hijo. Y nada más cruel que una muerte por descuartizamiento. Este ha sido el trágico final del director de cine iraní Babak Khorramdin, cuyo cadáver fue hallado en bolsas de basura en un barrio de Teherán con los restos troceados del realizador. Según las primeras investigaciones, los autores del crimen serían sus padres, que fueron detenidos por la Policía iraní tras encontrar en la casa un cuchillo ensangrentado y un machete.

Al parecer, el origen del asesinato estuvo en una discusión que el hijo mantuvo con sus padres por su condición de hombre soltero. Habría sido, por tanto, un crimen por prestigio social. «Mi hijo no estaba casado. Solía acosarnos con frecuencia. Nuestras vidas pendían de un hilo. No pensamos que estuviéramos a salvo. Solía burlarse de nosotros con frecuencia. Hacía lo que quería. Entonces su madre y yo decidimos deshacernos de él. No queríamos perder nuestra reputación», dijo el padre en una confesión.

El presunto autor del crimen reconoció que tras la pelea decidió sedar al hijo. Luego lo apuñaló y en el baño de la casa lo troceó y lo metió en bolsas de basura. El progenitor ha asegurado no sentir ningún remordimiento por el atroz asesinato. Durante la confesión ante el juez, los padres reconocieron además ser autores del asesinato hace años de su hija y de su yerno.

Nacido en 1974 en Teherán, Babak, director del cortometraje «The Sun», se había graduado en 2009 Bellas Artes, con especialidad en cine. Poco después se marchó a Londres en 2010 para forjar su carrerar de cinesta. Sin embargo, decidió volver a Irán para reencontrarse con su familia y enseñar cine a los jóvenes. Babak había realizado otros cortometrajes como «Crevice» y «Oath to Yashar», con tintes autobiográficos, en los que retrató la historia de un joven que se mudaba a Londres para estudiar.

Jason Brodsky, analista de Oriente Medio y editor de Irán International TV, interpretó este suceso con estas palabras: «Creo que la horrible muerte de Babak Khorramdin es solo el último ejemplo de un largo patrón de violencia doméstica que hemos visto en Irán».

Irán ha sido escenario de episodios de extremada crueldad en los últimos años contra homosexuales, mujeres adúlteras y niños. Pese a la aprobación en el Parlamento iraní el año pasado de una ley de protección de la infancia, aún siguen produciéndose crímenes de honor contra aquellos que vulneran ciertas costumbres sociales, dicen los expertos.

Recientemente, el joven Alireza Fazeli Monfared fue decapitado por sus familiares cuando el Ejército desveló su homosexualidad. El mismo hermanastro confesó el hecho a la madre con una frase demoledora: «lo liquidamos». Tras escuchar las palabras, la madre tuvo que ser hospitalizada en estado de shock.