México

López Obrador vuelve a la carga contra España por “la matanza de miles de indígenas”

En el 500 aniversario de la caída de Tenochtitlan, el presidente mexicano niega que los españoles liberasen a los pueblos aztecas pero reconoce que se unieron a Cortés para “sentirse libres y no vivir como esclavos”

La explanada de la Plaza Toaxcoaque de la capital mexicana se vistió este viernes con danzas y rituales para conmemorar y reclamar la memoria del día de libertad de los pueblos originarios antes de la conquista española del 13 de agosto de 1521
La explanada de la Plaza Toaxcoaque de la capital mexicana se vistió este viernes con danzas y rituales para conmemorar y reclamar la memoria del día de libertad de los pueblos originarios antes de la conquista española del 13 de agosto de 1521Mario GuzmánAgencia EFE

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha criticado con especial dureza el papel de España en la colonización durante la conmemoración de los 500 años de la caída de Tenochtitlan, antigua capital del Imperio Azteca y actual Ciudad de México: “Hoy, fecha funeral, recordamos la caída de la gran Tenochtitlan y ofrecemos perdón a las víctimas de la catástrofe originada por la ocupación española de Mesoamérica y del resto del territorio de la actual república mexicana”. AMLO ha cargado contra quienes defienden que “España liberó América” y ha remarcado que la ayuda de “los pueblos indígenas que se sumaron a (Hernán) Cortés no debe servir para justificar las matanzas llevadas a cabo por los conquistadores ni le resta importancia a la grandeza cultural de los vencidos. Se unieron por sentirse libres y no por vivir como esclavos”.

AMLO ha rechazado “justificar la invasión en nombre de la libertad, la fe, la superioridad racial o la civilización”. Pese a reconocer que “no es fácil el análisis sobre la colonización española”, ha lanzado un dardo en forma de reflexión: “La pregunta obligada es si la matanza de miles de indígenas en la toma y masacre de Tenochtitlan trajeron civilización a la tierra que Cortés bautizó como la Nueva España. ¿Valieron la pena tantas muertes? ¿Tantas mujeres violadas? ¿Tantas atrocidades ordenadas por el mismo Cortés y por él relatadas en sus cartas al Rey?”

Niega la liberación de los conquistadores

Obrador ha rechazado atribuir a la conquista progresos sociales: “Considero ofensivo volver a la vieja polémica de que los originarios de Mesoamérica, y en particular los mexicas, eran bárbaros. Entre las llamas que achicharraban a los herejes y los sacrificios humanos de los aztecas hay pocas diferencias”, ha remarcado en el Zócalo, la emblemática plaza en el centro de la capital mexicana.

La retahíla de reproches a España ha culminado con la crítica del modelo colonial: “En 1518 se contaba con 11 millones de habitantes. En 1821 la población de México, que había logrado su independencia, era de 6 millones de personas. ¿De qué civilización se puede hablar si se pierde la vida de millones de seres humanos y el imperio dominante no logra en tres siglos ni siquiera recuperar la población que existía antes de la ocupación militar? A los habitantes de la antigua Tenochtitlan se les condenó a vivir en las afueras, en la marginación”.